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16 Chitak Tzak: Un centro regional Postclásico Tardío de los Mayas Kaqchikel – Eugenia J. Robinson – Simposio 07, Año 1993

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Robinson, Eugenia J.

1994        Chitak Tzak: Un centro regional Postclásico Tardío de los Mayas Kaqchikel. En VII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1993 (editado por J.P. Laporte y H. Escobedo), pp.145-153. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.

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CHITAK TZAK: UN CENTRO REGIONAL POSTCLÁSICO TARDÍO DE LOS MAYAS KAQCHIKEL

Eugenia J. Robinson

El presente trabajo resume la cultura arqueológica del Postclásico Tardío Maya Kaqchikel, según se representó en el sitio de Chitak Tzak. Se trata de un centro defensivo regional, localizado al sur de Sumpango, en el departamento de Sacatepéquez (coordinadas 423179; mapa 2059 IV). Los Kaqchikel, cuya capital fue Iximche, cerca de Tecpan, vivieron en centros regionales donde habitaban los nobles y principales para controlar territorios dentro de su gran sistema político (Polo Sifontes 1986), los cuales se extendieron hasta el río Motagua al norte; la bocacosta del Pacífico al sur; el lago de Atitlán al oeste y el Cerro Alux al este (Figura 1).

Chitak Tzak (que significa Casas Destruidas) es evidentemente uno de estos poco usuales centros regionales (se cree que existieron sólo cuatro o cinco de éstos, comunicación personal E.M. Shook, Vinicio García, Robert Hill 1992). Puesto que hubo arquitectura y plazas de piedra y es el sitio del Postclásico Tardío más complejo en el área de Antigua. Dentro de la tradición oral local se denomina «Viejo Sumpango» y los sumpangueros consideran que se trata de una iglesia. El sitio fue abandonado después de un terremoto que destruyó sus casas y los pobladores se reasentaron en el lugar donde se encuentra Sumpango actualmente, unos pocos kilómetros al norte. Chicak es uno de los 38 ó 40 pueblos que aparecen en la Crónica Franciscana del siglo XVI, como uno de los centros sujetos a Iximche (Carmack 1973).

Antecedentes del sitio

El 16 de noviembre de 1989, Cástulo Puc Raxon registró el sitio por primera vez como parte de la Encuesta Arqueológica Kaqchikel de CIRMA. Se determinó que los muros y las estructuras se fechaban para el Postclásico Tardío (1200-1500 DC) y la cerámica de superficie iba del Preclásico Medio-Terminal (600 AC – 200 DC) hasta el Clásico Temprano (300-600 DC; Robinson 1990).

El Proyecto Arqueológico del Área Kaqchikel (PAAK) regresó al sitio en 1991 para mapearlo y realizar excavaciones de muestreo. Los materiales arqueológicos dejaron de aparecer sobre el manto de roca a 1.60 m debajo de la superficie. La Suboperación 1, situada entre las Estructuras F3-3 y E3-1, descubrió fragmentos de un posible piso de laja de andesita y unos pozos de basurero llenos de cerámica y carbón del Postclásico Tardío. Se comprobó que se trataba del depósito más rico de materiales arqueológicos en el sitio. La Suboperación 2 expuso lajas de andesita y pisos de barro del Postclásico Tardío, cubriendo un depósito de material del Clásico Temprano.

Fue durante este tiempo que supimos que el sitio había sido usado como una mina de extracción de piedras para realizar construcciones en Sumpango desde los años de la década de 1920, por lo que su estado de conservación era extremadamente malo y muy peligroso para el futuro del sitio.

De enero a marzo de 1993 regresamos al sitio para tratar de entender mejor la cultura arqueológica de la élite Kaqchikel de este centro rural antes de su posterior destrucción. Antes de realizar nuestro trabajo se conocía acerca de la cultura elitista Kaqchikel de Iximche por las fuentes etnohistóricas y las excavaciones llevadas a cabo en Iximche (Los Cakchiqueles en la Conquista de Guatemala por Polo Sifontes 1986 y El Memorial de Sololá, introducción y notas de Adrián Recinos 1980 y los artículos de George Guillemin 1977). Estábamos sumamente interesados en conocer la función de las estructuras y los sistemas económicos, sociales y rituales de esta gente, así como registrar su arquitectura, cerámica y lítica. También teníamos gran interés en fechar el sitio. En total se examinaron nueve estructuras, con 30 suboperaciones y se recuperaron unos 50,000 artefactos de cerámica y lítica.

DESCRIPCIÓN DEL SITIO

El sitio tuvo una localización defensiva; está situado en una península de tierra amplia y plana rodeada en tres lados por profundas barrancas defensivas y por montañas al norte. La posición del sitio le permitió haber funcionado como un lugar clave para la vigilancia del corredor noroeste del río Guacalate. En los alrededores del sitio hay excelentes tierras para la agricultura, no únicamente en el área de Los Camotales, donde se localiza este sitio, sino también en una gran explanada llamada Los Planes, donde actualmente se realizan actividades agrícolas. En el cercano riachuelo Tizate se localizan nacimientos de agua fresca y caliente (Figura 2).

La frontera del sitio está definida por muros de piedra que encierran 20 estructuras y cuatro plazas y patios. El sitio mide 250 m de largo por 175 m de ancho en su punto más ancho. La irregularidad en la dirección de los muros puede deberse a la piedra que se ha extraído. La plaza mas grande, 150 x 150 m, se ubica en el lado sur y allí se encuentra el edificio más alto de 3 m. Otros patios más pequeños de unos 75 x 50 m se definen hacia el norte, alrededor de las Estructuras E3-1 y F3-1. En el lado oeste hay un grupo de pequeñas estructuras. Aparentemente hay dos tipos de montículos: uno es una plataforma rectangular de 25 x casi 50 m de largo (por ejemplo: E3-1, E4-1 y D5-1) y dos, la estructura de picos gemelos con una depresión entre los dos picos (por ejemplo, D4-1, D5-2 y B5-1). El material cerámico no indica que haya existido diferencia de funciones domésticas entre ambos tipos de estructuras. Por medio de las excavaciones se localizaron estructuras invisibles: detrás de D5-2 hay una plataforma y escalinata que forma el lado este de otro patio. La orientación de los edificios, cuando ésta pudo ser determinada, es de 10° al este del norte magnético, que oscila entre unos 5° del norte verdadero (Figura 3).

ARQUITECTURA Y PISOS DE PLAZA

Todos los edificios del sitio fueron construidos de piedra. El núcleo de las construcciones son bloques de talpetate irregulares en una matriz de tierra amarilla. El edificio mejor conservado, la Estructura D5-2 ejemplifica el estilo de los edificios (Figura 4). Dos terrazas bajas, construidas de lajas de andesita, que miden 50 y 40 cm en altura y localizadas alrededor de la base del edificio estuvieron cubiertas por estuco, aunque en las partes superiores de los edificios no apareció este rasgo, aquí apareció una especia de repello que es una mezcla de tierra amarilla, talpetate y piedra pómez. En los picos gemelos de la estructura aparecieron dos pisos sobrepuestos de estuco blanco, indicando que aquí pudo haber habido cuartos o bancas. Fragmentos de petate y bajareque quemado en la base del edificio indican que ahí pudo haber existido un muro rodeado por este material, el cual se localizaba en algún lugar encima de las terrazas.

Al parecer en todo el sitio hubo uniformidad en cuanto al estilo arquitectónico. Casi todos los edificios investigados (Estructures E3-1, E4-1, D5-1, D5-2, C5-1, B5-1, D4-1a) presentaron remanentes de terrazas más bajas cubiertas con estuco. La Estructura B5-1 es la más similar a D5-2 puesto que todavía muestra evidencia de dos pisos sobrepuestos cubiertos con estuco en el pico occidental. La Estructura D4-1a, el edificio más alto, fue único en cuanto a que existe una escalinata adosada al centro frontal del edificio.

Figura 1 Mapa del área Kaqchikel

Figura 2 Mapa del área de Sumpango y la localidad de Chitak Tzak

Figura 3 Mapa de Chitak Tzak

        Los pisos de tierra predominan en las plazas y patios del sitio. El único piso continuo de estuco se localiza entre las Estructuras D5-2 y D6-1. Un piso de tierra existe entre las Estructuras D5-2 y D5-1 y en la plaza más grande. Unas pocas lajas de andesita a 20-30 cm de profundidad, en algunas pocas excavaciones surgieron que pudieron haber existido pisos de piedra en la plaza más grandes y frente a la Estructura E3-1.

Figura 4 Perfil de la Estructura D5-2

CONDUCTA RITUAL Y DOMÉSTICA

ENTIERROS

En el sitio se localizaron dos entierros y una gran área de ceniza, probablemente otro entierro; cada uno de éstos es único en su género. El primer entierro es un cuerpo quemado en posición extendida. Se encontró en el frente central de la Estructura D5-2 dentro de un estrato de tierra negra y quemada. El individuo descansa sobre el nivel del piso definido por una proyección de estuco de 12 cm que sale de la base de la terraza de abajo. No había artefactos que acompañaran este entierro. La posición, relativamente superficial, del individuo sugiere que pudo tratarse de un enterramiento apresurado después de que el terremoto destruyera el sitio. Una fecha de radiocarbono asociada con el individuo es 1420 ± 60 años (Suboperación 23-5).

El segundo probable entierro fue un gran depósito de ceniza a 20-30 cm de profundidad y 40 cm abajo de la superficie al frente de la Estructura D4-1a, el edificio más alto del sitio. Aparentemente se trata de un entierro humano, aunque no se encontraron bienes de enterramiento ni remanentes óseos directamente asociados. Algunos centímetros encima y en el extremo oeste de donde estaba la ceniza apareció un fémur humano. Se desconoce si éste fue enterrado por separado o si estaba asociado con el depósito de ceniza.

El último entierro fue una tumba con un entierro secundario del Clásico Temprano, localizado en la base sur de la Estructura E4-1. La tumba era un agujero de 1 x 1.5 m (y 1.1 m de profundidad) con una base redondeada de barro (Figura 5). No estaba cubierto, pero por el contrario estaba completamente rellenado con bloques de talpetate y restos de piso de estuco. En el fondo del agujero, cerca de donde empezaba la base redondeada, había lajas de andesita dentro del relleno; no habían sido colocadas para formar un piso o techo, únicamente estaban mezcladas con el relleno. En la base de la tumba había un entierro secundario del Clásico Temprano. Consistía de dos vasijas con pestaña basal, un cráneo aplastado con una cuenta verde dentro de un cuenco y huesos largos dentro del otro cuenco. No apareció evidencia de un entierro del Postclásico Tardío dentro de la tumba, excepto que el barro de la base era demasiado suave, con tierra de color beige que pudo haber sido parte de un cuerpo extendido que se deshizo.

BASUREROS

En 1991, la Suboperación 1 descubrió una gran área de basurero entre las Estructuras E3-1 y F3-1. Esta área se abrió en una longitud de 3 m. En el piso de la excavación, había depresiones de 30 cm de ancho por toda el área. En 1993, encontramos una extensión de esta área de basurero frente a la Estructura E3-1. Estos depósitos de basura nos condujeron a una fecha de 1440 ± 50 años (Suboperación 29A-7).

Figura 5 La tumba de la Estructura E4-1

CERÁMICA

Las cerámicas del sitio son muy similares a los materiales descritos para Antigua por el Proyecto de Investigaciones Americano-Hispánicos (Sharer et al 1970). La cerámica más común es la que denominamos Balanya. Lo que distingue a esta cerámica es un engobe grueso blanco micáceo que recubre una pasta rosácea con inclusiones de desgrasante de cuarzo. La forma característica es el cántaro con cuello alto y dos asas de banda de cuerpo a cuerpo. Es muy similar a la cerámica Poaquil Micáceo con Engobe: Variedad Poaquil, pero difiere en que en ésta última hay una pasta micácea.

Otro tipo menos frecuente y que carece de nombre, fue llamado Tipo J. Es una cerámica roja bien pulida donde prevalece la forma de cántaro con cuello corto y borde divergente. Este tipo es muy similar a la cerámica Yepocapa Rojo: Variedad Yepocapa de Antigua (Sharer et al 1970).

Otro tipo sin nombre que ocurre con la misma frecuencia que el Tipo J, es un tipo pintado de blanco sobre rojo, denominado Tipo F. Presenta diseños de animales y geométricos sobre cuencos y cántaros. Es muy similar a la cerámica Tabacal Rojo Sobre Blanco de Antigua (Sharer et al 1970).

Por último, las dos áreas comparten el mismo tipo de cerámica Alotenango Crema: Variedad Alotenango, un cuenco poco profundo de pasta roja fina con un engobe blanco duro.

Otro tipo que tampoco ha sido nombrado, ocurre en bajas frecuencias y es un cuenco rojo sobre ante.

OBSIDIANA

El análisis de una muestra de obsidiana proveniente de contextos del Postclásico Tardío muestra que 68% del material proviene de El Chayal y 2% de Ixtepeque. Este es un cambio substancial en cuanto a la distribución de obsidiana para el periodo Clásico, cuando la mayor parte de la obsidiana proviene de San Martín Jilotepeque. Geoffrey Braswell ha observado que existe una transferencia real en relación a los patrones de obtención de obsidiana durante esta época y que por lo menos la clase elitista de Chitak Tzak, tuvo acceso a una obsidiana de calidad más fina (Braswell 1990).

APRECIACIONES GENERALES

Los análisis de las excavaciones en Chitak Tzak continúan en proceso y aún debe ser completada toda la información base. A pesar de que contamos con las publicaciones relacionadas a Iximche y Mixco Viejo, en este momento nos hacen falta las descripciones detalladas de la cerámica y lítica de Iximche, que también se encuentran en proceso de análisis. Nuestras observaciones preliminares concernientes a la cultura de Chitak Tzak son que los habitantes del sitio participaron de la cultura general de las Tierras Altas durante el Postclásico Tardío, pero ellos tuvieron sus propias tradiciones regionales en lo relacionado con la disposición del sitio, su arquitectura y los patrones de enterramiento. Por ejemplo, la plaza principal del sitio tiene las mismas proporciones de las plazas de Iximche, pero en el sitio no existen los grandes palacios y templos como ocurre en la capital Kaqchikel. El estilo estructural parece ser repetitivo como en Iximche, pero en Chitak Tzak no hay duplicados con en la capital. Se usó estuco en los edificios aunque de manera escasa, únicamente a lo largo de los pisos de corredores y terrazas.

También son únicos los patrones de enterramiento. Para Mixco Viejo se conocen cremaciones en urnas y en Iximche aparecen tumbas y entierros en la base de los edificios. Las probables cremaciones extendidas y los cuerpos quemados que aparecieron en Chitak Tzak son, hasta donde conocemos, bastante poco usuales. En Alta Verapaz se ha documentado la reutilización de tumbas durante el periodo Postclásico Tardío, pero nuestra tumba fue construida durante el Postclásico Tardío y un entierro del Clásico Temprano fue cuidadosamente depositado en una de las esquinas. Su posición en la base del edificio era de esperarse, conociendo el patrón de Iximche.

Sin embargo, las cerámicas son muy similares a las de Antigua, lo que implica que dentro de toda el área Kaqchikel, Chitak Tzak fue parte de una zona de interacción con Antigua. Posteriores investigaciones en el área Kaqchikel nos permitirán determinar las zonas de interacción y las variaciones regionales.

REFERENCIAS

Braswell, Geoffrey E.

1990        La Obsidiana de Sumpango. En Reconocimiento de los Municipios de Alotenango y Sumpango, Sacatepéquez, editado por E. Robinson, pp.57-78. Centro de Investigaciones Regionales de Mesoamérica, Antigua Guatemala.

Carmack, Robert

1973        Quichean Civilization: The Ethnohistoric, Ethnographic, and Archaeological Sources. University of California Press, Berkeley.

Guillemin, George F.

1977        Urbanism and Hierarchy at Iximche. En Social Process in Maya Prehistory: Studies in Honor of Sir Eric Thompson, editado por N. Hammond, pp.227-264. Academic Press, London.

Polo Sifontes, Francis

1986        Los Cakchiqueles en la Conquista de Guatemala. José de Pineda Ibarra, Guatemala.

Recinos, Adrián

1980        Memorial de Sololá: Anales de los Cakchiqueles. Título de los Señores de Totonicapán. Piedra Santa, Guatemala.

Robinson, Eugenia J.

1990        Reconocimiento de los Municipios de Alotenango y Sumpango, Sacatepéquez: Informe Final del Proyecto Encuesta Arqueológica Kaqchiquel. Reporte entregado al Centro de Investigaciones Regionales de Mesoamérica y al Instituto de Antropología e Historia de Guatemala, Guatemala.

Sharer, Robert J. et al

1970        The Pottery of Antigua, Guatemala: Collections Recovered by the Hispanic American Research Project. 1969-1970. Manuscrito.

 

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