Categorías

33. NUEVAS INVESTIGACIONES ARQUEOLÓGICAS EN UAXACTUN: RESULTADOS PRELIMINARES DE LA PRIMERA TEMPORADA DE CAMPO 2009 DEL PROYECTO ARQUEOLÓGICO SAHI-UAXACTUN – Milan Kováč, Ernesto Arredondo, Branislav Kovár, Ramzy Barrois, Martin Hanuš, Barbara Zajacová, Pavol Spišák, Maite Carbonell, Mónica Pellecer, Alejandro Guillot, Edy Barrios, Mónica de León, Martin Nagy, Jakub Špoták, Silvia Alvarado y Melanie Forné – Simposio 23, Año 2009

Descargar este artículo en formato PDF

Kováč, Milan, Ernesto Arredondo, Branislav Kovár, Ramzy Barrois, Martin Hanuš, Barbara Zajacová, Pavol Spišák, Maite Carbonell, Mónica Pellecer, Alejandro Guillot, Edy Barrios, Mónica de León, Martin Nagy, Jakub Špoták, Silvia Alvarado y Melanie Forné

2010        Nuevas investigaciones arqueológicas en Uaxactun: Resultados preliminares de la primera temporada de campo 2009 del Proyecto Arqueológico SAHI-UAXACTUN. En XXIII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2009 (editado por B. Arroyo, A. Linares y L. Paiz), pp.425-440. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala (versión digital).

33

NUEVAS INVESTIGACIONES ARQUEOLÓGICAS EN UAXACTUN: RESULTADOS PRELIMINARES DE LA PRIMERA TEMPORADA DE CAMPO 2009 DEL PROYECTO ARQUEOLÓGICO SAHI-UAXACTUN

Milan Kováč

Ernesto Arredondo

Branislav Kovár

Ramzy Barrois

Martin Hanuš

Barbara Zajacová

Pavol Spišák

Maite Carbonell

Mónica Pellecer

Alejandro Guillot

Edy Barrios

Mónica de León

Martin Nagy

Jakub Špoták

Silvia Alvarado

Melanie Forné

Proyecto Arqueológico SAHI-Uaxactun

PALABRAS CLAVE

Arqueología Maya, Tierras Bajas, Uaxactun, Acrópolis triádica, Juego de pelota, Grupos residenciales

ABSTRACT

NEW ARCHAEOLOGICAL INVESTIGATIONS IN UAXACTUN: PRELIMINARY RESULTS FROM THE FIRST FIELD SEASON OF THE SAHI-UAXACTUN ARCHAEOLOGICAL PROYECT

Investigated since the first years of archaeological exploration in Guatemala, the archaeological site of Uaxactún is visited once again. The Sahi-Uaxactún Archaeological Project of the Slovak Institute of Archaeology and History is a group effort composed of Slovakian, French, and Guatemalan researchers whose objective is to complete investigations previously undertaken at the site. During the first field season excavations were carried out in groups not investigated before or where the investigations were not intensive; these included Groups C, F, G, and H-North. In addition, restoration work at the ball court of Group A was undertaken, as well as a new mapping program. As we advance in our investigations, we hope to complement past work at the site, collaborating for a better understanding of the history of this important settlement, a fundamental pillar within the history of Maya archaeology.

El Proyecto Arqueológico Uaxactun, propuesto por el Instituto Eslovaco de Arqueología e Historia (SAHI), es un proyecto científico internacional, cuyo objetivo principal es el de incrementar nuestro conocimiento sobre el sitio arqueológico de Uaxactun a través de sus áreas no exploradas. Como objetivo paralelo se pretende contribuir a la puesta en valor del sitio, previendo trabajos de restauración y conservación en el mismo. La iniciativa de realizar un proyecto arqueológico en el área Maya, surgió del Doctor Milan Kováč, miembro del SAHI y Director del Departamento de Antropología de las Religiones en la Universidad de Comenio, Bratislava, Eslovaquia, académico de la cultura y religión Maya y quien ha trabajado desde 1994 con la comunidad Lacandona en Chiapas. El Dr. Kováč gradualmente encabezó un programa de reconocimiento de las ruinas en la Selva Lacandona y en la sierra norte de Chiapas en México y en 2007 extendió su interés a la región de Petén, despertando, asimismo, el interés de los directores del SAHI (Peter Valent y Drahoslav Hulínek). Ante la solicitud del SAHI para realizar excavaciones arqueológicas en Petén, el Instituto de Antropología e Historia (IDAEH) sugirió realizar investigaciones en el sitio arqueológico Uaxactun (Figura 1).

El asentamiento arqueológico ubicado en el municipio de Flores, Petén, está compuesto de ocho grupos o conjuntos arquitectónicos (A-H) separados actualmente por una pista de aterrizaje en desuso, quedando los grupos A, B y C hacia el oeste, mientras los grupos D, E, y F se localizan al este de la misma (Figura 2). El Grupo G, es un grupo al oeste del sitio y hasta ahora ha quedado fuera de los mapas disponibles.

INVESTIGACIONES ANTERIORES EN UAXACTUN

La investigación de Uaxactun ha sido extensa, ya que fue uno de los primeros sitios reportados en el área del centro de Petén, siendo reportado por primera vez en el año de 1916 por Sylvanus G. Morley de la Institución Carnegie de Washington (Morley 1916, 1922, 1937-38). Desde entonces, el sitio ha sido explorado en varias ocasiones, iniciando con las visitas, reconocimientos y excavaciones de la Institución Carnegie durante los años veinte y treinta del siglo veinte (Ricketson y Ricketson 1937:xi; Smith 1950). Posteriormente el sitio fue incluido como parte de los reconocimientos realizados por el Proyecto Tikal de la Universidad de Pennsylvania en los años setentas (Puleston 1974), para luego continuar excavaciones en los periodos de 1983 a 1985, bajo la dirección de Juan Antonio Valdés, del Proyecto Nacional Tikal (Valdés 1986). Por último, entre 1988 y 1989 se llevó a cabo un proyecto de rescate en el Grupo D (Acevedo, Calderón y Hermes 1992).

Estos proyectos han dado como resultado un amplio y profundo conocimiento del sitio, resaltando los trabajos recientes y las publicaciones del Dr. Valdés que cubren la historia del sitio desde el periodo Preclásico, hasta el Clásico Terminal (Valdés 1989, 1993, 2005; Valdés y Fahsen 1993, 1995; Valdés, Fahsen y Escobedo 1999). Sin embargo, y pese a su valor histórico dentro de la evolución de la arqueología Maya, Uaxactun ha carecido de un proceso de investigación y mantenimiento constante como podría esperarse.

LA OCUPACIÓN EN UAXACTUN

El sitio arqueológico Uaxactun tiene una larga ocupación cuyos orígenes se remontan al periodo Preclásico. Las primeras evidencias de actividad humana (tiestos escasos), están fechadas para tiempos Pre-Mamom, aunque la actividad constructiva con certeza corresponde a plataformas circulares y rectangulares de la Fase Mamom (500 AC – 350 AC) encontradas en el Grupo E (Valdés 1987:384, 1992:16). Hacia la Fase Chicanel (350 AC – 250 DC), el sitio tuvo un incremento constructivo notable, construyéndose en el Grupo E lo que se ha llamado Grupo Tipo E, en honor a este mismo complejo descubierto en Uaxactun (Laporte y Fialko 1993: 68). Al sur del este grupo, se construyó un conjunto triádico de estructuras que conformaron la primera acrópolis de Uaxactun (Valdés 1986, 1999). Ésta fue inicialmente construida en un área más baja que la plaza del Grupo E y por lo tanto se le conoce como la Plaza Hundida. Alrededor de los años 150 – 100 AC, un nuevo complejo triádico fue construido hacia el este en el actual Grupo H Sur (Valdés, Fahsen y Escobedo 1999:17). Pero la actividad constructiva y ocupacional cesaría en dicho grupo y hacia el año 250 DC éste sería sepultado y abandonado. Durante los siguientes cincuenta años, el Grupo E retomaría la preponderancia del poder político de Uaxactun.

Entre los años 250 a 300 DC (Fase Tzakol 1), un nuevo grupo triádico se elevaría cubriendo la antigua Plaza Hundida en el Grupo E y traería una nueva sede del poder político a un lugar sacralizado por sus antiguos ocupantes (Ibid:21). Durante la Fase Tzakol 2 (300 – 378 DC), una nueva acrópolis triádica sería construida en una zona de elevación mayor: la meseta artificial donde se ubican los grupos A y B. Aunque existe evidencia de ocupación de la Fase Tzakol 1 en el Grupo A, esta nueva construcción (Estructura A-V) marcaría el inicio de un notable desarrollo en el área (Valdés 1987:387), en el cual el Grupo B iniciaría a su vez un intenso periodo de ocupación y desarrollo (Laporte 1989, 2005). El Grupo E aún mostraría evidencia de actividad y en él se erigirían dos estelas más alrededor del año 358 DC (estelas 18 y 19). Es interesante notar, que este cambio de ubicación a una zona más elevada, puede corresponder a un estado belicoso notado en otras áreas de Petén durante el siglo IV (Arredondo s.f.:156-160).

La Fase Tzakol 3 (378 – 550 DC) inició con un evento dramático que influyó en los años posteriores a varios sitios: La Entrada. Este suceso, estudiado extensivamente por varios autores (Mathews 1985; Shele y Freidel 1990; Stuart 2000; Braswel 2003), tuvo incidencia directa en la historia de Uaxactun. Luego de un cambio brusco en la dinastía de Tikal, el líder de esta nueva fuerza avanzó hacia Uaxactun conquistándolo y estableciendo en él su residencia. A partir de entonces, el edificio A-V iniciaría una serie de adiciones que lo llevaría a convertirse, posteriormente, en una acrópolis palaciega. El Grupo E aún muestra modificaciones y adiciones arquitectónicas, aunque durante el Clásico Tardío caería en un abandono de sus funciones originales (Rosal y Valdés 2005:149-154).

El Clásico Tardío sería un periodo de constante ocupación en Uaxactun. Aunque aún poco conocida, la primera parte del mismo (Tepeu 1: 550 – 700 DC) muestra continuidad en la construcción (Valdés 1987:389, 1999:73-74). Durante Tepeu 2 (700 – 850 DC) se daría forma a la Plaza Principal del Grupo A, se construiría una nueva calzada hacia el sur del mismo, se construiría la Plaza Oeste, y se erigirían nuevas estelas (Valdés 2005:62-85). El Grupo B continúa con una activa construcción en sus edificios (Laporte 2005). El grupo D tiene un ascenso ocupacional (Acevedo, Calderón y Hermes 1992:129), mientras el Grupo E estaría en abandono casi total, salvo por algunas reocupaciones esporádicas. En el área periférica, los alrededores muestran su mayor ocupación durante el Clásico Tardío (Acevedo y Paz 2005:170), aunque un notable descenso ocurre hacia el Clásico Terminal, cuando la actividad constructiva del sitio y sus alrededores disminuye. Sin embargo, la vida política del sitio continuaría hasta por lo menos finales del siglo IX. Dos estelas fueron erigidas en esa época: la estela 13 (830 DC) y la estela 12 (889 DC). La primera haría referencia a un evento bélico, y más aún, Valdés y Fahsen (2004) han argumentado que para entonces Uaxactun ejercía dominio sobre el cercano centro de Jimbal. La segunda estela, y última erigida en el sitio, haría referencia a un acto realizado en compañía de uno de los últimos gobernantes de Tikal. Poco tiempo después, el sitio caería en el total abandono y no volvería a ser ocupado en casi los siguientes mil años.

PRIMERA TEMPORADA DE CAMPO DEL PROYECTO ARQUEOLÓGICO SAHI-UAXACTUN

La Primera Temporada de Campo del Proyecto Arqueológico SAHI-Uaxactun dio inicio el día 28 de febrero de 2009 con el arribo de la comitiva académica integrada por catorce personas entre eslovacos, guatemaltecos, un francés y una española, provenientes del SAHI, la Universidad de Comenio en Bratislava, la Academia Eslovaca de las Ciencias (SAV) y de las Universidades San Carlos y del Valle de Guatemala. Nuestras investigaciones iniciaron formalmente el día 2 de marzo de 2009 y se extendieron a lo largo de dos meses de trabajo, concluyendo el día jueves 30 de abril habiendo completado el proceso de relleno de todas las excavaciones realizadas. Durante la presente temporada se realizaron seis operaciones distribuidas en los Grupos B, C, F, G y H del sitio arqueológico y siguiendo los objetivos y lineamientos suscritos en nuestra propuesta de investigación (Arredondo y Kováč 2008).

OPERACIÓN 1: INVESTIGACIÓN Y RESTAURACIÓN EN EL JUEGO DE PELOTA

Los trabajos en la Estructura B-V o juego de pelota, enfocaron sus esfuerzos en la restauración y consolidación de dicha estructura en sus dos plataformas paralelas de 17.5 m de largo por 6 m de ancho. La operación estuvo a cargo del Dr. Ramzy Barrois de la Escuela de Louvre, Paris y del restaurador del Parque Nacional Tikal, el Sr. Cruz Jau, quienes iniciaron los trabajos con sondeos y excavaciones en varios sectores del edificio. Estas excavaciones continuaron a lo largo de la temporada, creando la base científica que sustentaría la restauración. Si bien esta estructura fue intervenida con anterioridad (Smith 1950), los datos registrados por el Dr. Barrois mostraron incongruencias con los planos originales (Figura 3). Nuevos perfiles fueron realizados y el trabajo continuó en base a las evidencias encontradas esta temporada por medio de las excavaciones. La Estela B-1 se dejó expuesta, habiéndosele practicado un proceso de limpieza y consolidación, luego de realizar un proceso similar en el relleno de la Estructura B-V que la rodeó.

Nuestras excavaciones de la cancha de juego de pelota han permitido corregir los datos publicados por la Carnegie después de las temporadas de excavación de los años treinta. El perfil de la cancha se muestra ahora bastante diferente de lo que vieron los investigadores de la Institución con sede en Washington. El plano que dibujó Ledyard Smith corresponde más a la arquitectura de las canchas del altiplano mexicano. Por el contrario, nos dimos cuenta que la cancha corresponde perfectamente al tipo 1, variedad 0 de Taladoire (2001:104), un tipo de cancha que aparece al principio del Clásico Tardío.

La presencia de tiestos de Tepeu 1 (550 – 700 DC) en el núcleo de la estructura confirma el fechamiento arquitectónico elaborado por Taladoire y al contrario de lo que indicó A. Ledyard Smith, encontramos solamente una fase de construcción. Las estructuras fueron construidas por partes encajeradas. Es decir, que el núcleo esta delimitado por un primer muro alrededor del cual los constructores erigieron un segundo muro de contención. Luego, una tercera pared consolidó el conjunto antes que el muro exterior sirviera como soporte de la capa de estuco. Este tipo de construcción asegura una construcción sólida. Abajo del piso que pasa por debajo de la estructura encontramos un escondite con 600 fragmentos de obsidiana y cerámica policroma de alta calidad.

En resumen, las diferencias entre los resultados obtenidos por el SAHI y la Institución Carnegie fueron: 1) una única fase constructiva; 2) la altura y forma del remate de la estructura; 3) la forma de la pared posterior; 4) la longitud de talud; 5) un descanso de 0.5 m de ancho al final superior del talud inclinado; y 6) la existencia de cuatro escaleras dispuestas en las esquinas de las plataformas.

El proceso de restauración del juego de pelota se llevó a cabo al mismo tiempo que los trabajos arqueológicos, avanzando siempre a la par de las nuevas evidencias mostradas por las excavaciones. La técnica de restauración usada fue la anastilosis (consistente en reincorporar a la estructura, piezas faltantes originales que se hayan caído y así completar las “lagunas”). Además, como lo permiten las reglas de restauración, reconstruimos hasta dos niveles de piedra cuando existió evidencia. Por su estado de conservación, el edificio al este contó con una reconstrucción casi completa, mientras que, y debido a las intervenciones de los años treinta, el edificio oeste fue dejado en un estado que lo asemejó más a un edificio en estado de ruina. En los trabajos de consolidación y restauración el restaurador Cruz Jau usó materiales originales y mezclas basadas igualmente en materias naturales. El uso de los mismos permitió guardar una textura muy cercana a la original.

OPERACIÓN 2: EXCAVACIONES EN EL GRUPO C

El Grupo C, localizado al noreste del Grupo B, fue intervenido por dos equipos de excavación dirigidos por la arqueóloga Barbara Zajacová y la arqueóloga Mónica De León. Se intervinieron las estructuras C-VII y C-IV respectivamente. Estos primeros trabajos en el área revelaron edificaciones de élite muy bien conservadas y con una alta calidad constructiva (Estructura C-VII) y una secuencia arquitectónica que incluyó cerámica del Preclásico Tardío al Clásico Tardío (Estructura C-IV). El Grupo C es un asentamiento con dos espacios de plaza con varias estructuras organizadas a su alrededor. Cuenta con un edificio piramidal (C-I) en donde la Institución Carnegie encontró uno de los entierros más llamativos del área maya: el de un personaje, evidentemente de élite, sentado en un pequeño trono y datado para tiempos Tzakol 3 (378 – 550 DC; Smith 1950:102, Fig.140).

Las excavaciones en la Estructura C-IV descubrieron un edificio anterior con una orientación diferente a la construcción última, con materiales que datan la estructura para el Clásico Temprano pero que incluyeron a su vez materiales cerámicos de Preclásico Tardío asociados a un muro que pudiera tratarse de una construcción aún más temprana que la referida. Al ser abandonada la estructura del Clásico Temprano, se depositó el Entierro SAHI – 02/09 rompiendo uno de los pisos de este edificio temprano. El entierro colocado en una cista ovalada, tuvo como ofrendas un plato Zacatal Crema Policromo y un cuenco, los cuales dataron al rasgo como perteneciente al Clásico Tardío. Posteriormente a la colocación de este entierro, y siempre durante el Clásico Tardío, se construyó la Estructura IV Final. Ahora, con una orientación alineada con el espacio de plaza del actual Grupo C, el edificio presentó al menos cuatro cuartos cuadrangulares. La excavación de uno de ellos reveló la presencia de una banca recostada en el muro posterior de la estructura. Al abandono del edificio, la banca y los pisos debajo de ella fueron rotos y fue colocado el Entierro SAHI – 01/09 (Figura 4). La cerámica asociada a él pertenece al Clásico Tardío y se incluyeron un plato Zacatal Crema Policromo, un cuenco y un vaso-silbato. La intrusión de este último rasgo marcó el abandono de la Estructura C-IV.

Por su lado, la Estructura C-VII mostró una arquitectura de estupendo acabado y gran inversión constructiva en comparación con el edificio C-IV. Tres cámaras fueron descubiertas, conservándose en éstas el estuco que las recubrió. El edificio contó con grandes dinteles de piedra y su complejidad arquitectónica denota un origen elitista.

OPERACIÓN 3: EXCAVACIONES EN EL GRUPO F

Las excavaciones en el Grupo F fueron dirigidas por Ernesto Arredondo Leiva y la arqueóloga Maite Carbonell. Las limitantes de tiempo y de personal permitieron en este año realizar solamente una aproximación inicial a este grupo, compuesto por una plaza amplia (al norte), un grupo de plaza más al sur y un grupo compacto denominado Grupo F Sur. En la presente temporada los trabajos se enfocaron en un sondeo inicial y excavación en la sección denominada Grupo F Norte (constituida por los dos primeros asentamientos antes descritos). Estos trabajos incluyeron la exposición casi total de la Estructura F-XII. Las excavaciones revelaron una ocupación aparentemente larga y una muestra clara de materiales del Preclásico Tardío con ejemplos del Preclásico Medio aún por cotejar. Las dos elevadas plazas resultaron ser dos grandes elevaciones artificiales con una tasa de inversión de trabajo muy alta e inesperada por nosotros. Por su lado, la Estructura F-XII, una plataforma localizada al centro de la plaza, representó la ocupación del Clásico Tardío en el Grupo F Norte, y ha sido una oportunidad única para estudiar este tipo de plataformas en plazas, edificios un tanto relegados en las excavaciones arqueológicas. En la Estructura F-XII se encontró una ofrenda consistente en dos platos conteniendo quizás una ofrenda de material orgánico ya desaparecido.

OPERACIÓN 4: EXCAVACIONES EN EL GRUPO G

Encontrándose localizado hacia el noroeste del epicentro de Uaxactun, el Grupo G constituyó una oportunidad única en nuestra investigación en términos de la ocupación periférica y perteneciente al Clásico Tardío de Uaxactun. Las investigaciones estuvieron a cargo de los arqueólogos Branislav Kovár y Alejandro Guillot quienes llevaron a cabo varias unidades distribuidas en dos de los tres grupos arquitectónicos reconocidos por nuestro equipo y que componen por el momento el denominado Grupo G. Son éstos: el Grupo G Oeste, el Grupo G Central y el Grupo G Este (Figura 5).

Las excavaciones de 2009 comenzaron en el Grupo G Oeste. Éstas revelaron una ocupación perteneciente al Clásico Tardío. Sin embargo, una ofrenda (Op. 4 Subop. A, Rasgo #1) incluyó un tiesto del Preclásico Medio, y un chultun (Grupo G Oeste, Chultun #1) localizado en las afueras del grupo arquitectónico presentó curiosamente material datado también para el Preclásico. El Grupo G Oeste fue un grupo residencial con tres estructuras formando un grupo de patio abierto y elevadas del terreno circundante por una plataforma. Hacia el norte y fuera de la plataforma se encuentra una cuarta estructura cuyas dimensiones y volumen sobrepasan a las demás edificaciones de este patio. Las excavaciones cubrieron dos de las estructuras y varias zonas del patio.

Al oeste del patio, la Estructura G-II atrajo nuestra atención por su planta en forma de “C” y en ella se invirtió la mayor cantidad de tiempo de excavación. Debajo de ella y excavado en la roca madre, se localizó un chultún conteniendo un depósito de cerámica fina datada para el Clásico Tardío. También en la caliza se encontraron dos entierros (Entierros SAHI – 03/09 y SAHI – 04/09). Las características de deposición funeraria de estos entierros coinciden bien con las reportadas con anterioridad para el sitio durante este mismo periodo y en donde es notable la poca elaboración de los espacios de deposición (Valdés, Fahsen y Escobedo 1999:75). Ambos entierros pertenecieron a individuos adultos en posición decúbito lateral flexionado orientados hacia el norte (0° Azimuth) y estuvieron acompañados de un vaso y un plato cada uno, pudiéndose identificar uno de los platos como Zacatal Crema Policromo. Finalmente, se realizaron sondeos preliminares en un grupo palaciego de importancia (Grupo G Central) en donde prevemos excavaciones intensivas en la siguiente temporada.

OPERACIÓN 5: EXCAVACIONES EN EL GRUPO H (NORTE)

El Grupo H Norte, un complejo arquitectónico cuyas características lo definen como una acrópolis triádica, concentró nuestro mayor esfuerzo durante la presente temporada. Cinco equipos de trabajo fueron distribuidos en las estructuras principales en su plataforma basal denominada como Plaza Alta y en otra denominada como Plaza Baja. En la Estructura H-I, un edificio de aproximadamente 12 m de altura, el arqueólogo Martin Hanuš llevó a cabo 20 unidades, revelando un edificio de arquitectura compleja. Éste muestra una planta que lo convierte en un posible grupo triádico en sí mismo, contando no sólo con la estructura principal de forma piramidal, sino con dos estructuras laterales que se extienden a sus costados norte y sur pero alcanzando alturas menores. Martin Hanuš descubrió la fachada oeste y sur de la Estructura H-I permitiendo definir la forma de la base del edificio (Figura 6). Dentro del material recolectado en la superficie de la base de la estructura, se recolectaron dos puntas de lanza y cerámica que incluye formas transicionales entre Chicanel y Tzakol. Así mismo, existe evidencia que puede sugerir la existencia de una estructura anterior, una posibilidad que exploraremos durante nuestra próxima temporada.

Por su lado, Mónica Pellecer investigó la Estructura H-III (de aproximadamente 7.3 m de altura) llevando a cabo 14 unidades distribuidas en la cima y en la base del edificio, y en un pozo de saqueo en la parte sur de la misma (Figura 7). Sus excavaciones revelaron evidencia interesante sobre el abandono del edificio y sobre la remoción de material constructivo luego del abandono del mismo, materia que aún se encuentra bajo discusión y análisis. Por su parte, la Estructura H-V (de 5.1 m de altura) fue estudiada por Pavol Spišák quien, por medio de 10 unidades, descubrió el lado sur y el lado oeste de la base piramidal, y parte de la cima del edificio. Las excavaciones permitieron definir la forma de la base de la pirámide, así como descubrir las decoraciones en estuco sobre la misma y la forma de sus cornisas.

Hacia el centro de la Plaza Alta, Edy Barrios condujo una profunda excavación que arrojó datos importantes sobre la construcción de la plataforma basal de este grupo, detectando un amplio relleno y dos pisos estucados que corresponden bien a lo encontrado en la Estructura H-I. Barrios llevó a cabo posteriormente unidades en el borde oeste de la Plaza Alta, descubriendo un mascarón monumental de estuco y evidencias de un segundo, ambos a los costados de la escalinata de acceso al conjunto (Figura 8).

Las medidas y la orientación de los mascarones permiten presuponer que alcanzaron una altura de aproximadamente 4.5 metros con una longitud de aproximadamente 20 metros y conteniendo varios detalles iconográficos originalmente pintados en rojo. Aunque sin una excavación completa no es posible definir su significación exacta, podemos plantear dos hipótesis: 1) que se trata de un mascarón del Dios Sol–Jaguar; y 2) que se trata de un mascarón de Yax Hal Wits (“Primero Verdadero Cerro” o “primer cerro verdadero”). En la primera de las hipótesis el Dios Sol–Jaguar, que se identifica durante el Clásico con la deidad GIII (Schele y Miller 1986: 50), representa a un sol nocturno o del inframundo, y es conocido por ejemplos como los reportados en Cerros por Freidel y Schele (1988:550). Por su parte, el Yax Hal Witz representa la creación del mundo, implicando un simbolismo mitológico para toda la plataforma H Norte. El Yax Hal Witz fue identificado por Schele (1998:495) como uno de los mascarones encontrados en la plataforma del Grupo H Sur. Al momento nuestra interpretación final depende del progreso de las excavaciones programadas para la siguiente temporada.

Finalmente, el Dr. Kováč participó en las excavaciones del Grupo H realizando dos sondeos de limpieza con 5 unidades en la estructura de la Plaza Baja denominada H-XV, que tiene 7.4 m de altura. Encontró dos escalinatas en los lados este y norte de la estructura, pudiendo identificar al edificio como una pirámide radial. La cerámica recolectada muestra el mismo periodo de ocupación que el resto del Grupo H Norte. Por su parte, el piso alrededor de la estructura fue estucado, con acabado fino y pintado de negro. Estas particularidades de la Plaza Baja, su posición inferior en comparación a la plataforma alta, su orientación al oeste en relación al conjunto del Grupo H Norte, y el color negro del piso, pueden evocar una imagen del inframundo o Ek´Nab o “Mar Negro” (Schele 1998:490), en especial si tomamos en cuenta la importancia del camino nocturno del sol en la religión Maya (Kováč 2002:143) y sobre todo, si consideramos su vínculo inminente con la pirámide radial (Cohodas 1980:218). Más aún, la pirámide radial H-XV tiene una orientación exacta este–oeste sobre el axis de la estructura principal del Grupo Triádico, el edificio H-I, a una distancia de 130 m. El Dr. Kováč ha propuesto la posibilidad que los edificios triádicos de la Plaza Alta (H-I, H-III y H-V) sirvieran para observaciones de los movimientos solares desde H-XV en la Plaza Baja. El edificio H-I sirvió para observación de equinoccios, H-III para el solsticio invernal y H-V para el solsticio vernal. Para verificar esta hipótesis excavamos las orillas del lado oeste de las estructuras H-III y H-V, y medimos distancias, alturas y ángulos entre las pirámides. Después entregamos todos los datos preliminares al Observatorio y Planetario Hlohovec en Eslovaquia en donde el arqueo-astrónomo y subdirector científico del observatorio, Vladimír Karlovský, anticipa que el Grupo H Norte, con su grupo triádico y pirámide radial, podría funcionar como un observatorio solar. En vista que aún falta por excavar ciertos puntos en las pirámides y de medir exactamente algunas esquinas, para una confirmación definitiva tendremos que esperar hasta la próxima temporada.

OPERACIÓN 6: PROGRAMA DE MAPEO Y RECONOCIMIENTO

Dirigido por Martin Nagy, en colaboración con Jakub Špoták, el programa de mapeo constituyó la Operación 6 de nuestro proyecto. Durante los dos meses de trabajo de campo el equipo llevó a cabo un levantamiento topográfico que cubrió las áreas excavadas. Los datos recolectados servirán para la elaboración de un mapa topográfico más completo que los hoy por hoy disponibles y que en varios casos incurren en errores de localización (Grupo C) e incluso excluyen estructuras importantes (Grupo F) o grupos enteros (Grupo G). Por medio de tecnología de última generación este mapa incluirá las excavaciones realizadas y podrán evaluarse los contornos geográficos en tres dimensiones.

CONCLUSIONES

EL PRECLÁSICO TARDÍO

Basados en los resultados de nuestras investigaciones, todavía no sabemos claramente si el Grupo H Norte fue construido al mismo momento que el Grupo H Sur. Las evidencias obtenidas hasta hoy muestran una ocupación más tardía, así como una diferencia en la actividad constructiva reflejada en un número menor de las mismas en comparación con el Grupo H Sur. Es probable que esto indique que los orígenes del Grupo H Norte se encuentren al final de la fase Chicanel. Este punto será replanteado después de más excavaciones, pruebas de carbono 14, y luego de realizar una tipología más fina de cerámica del Preclásico Tardío, sobre todo gracias a los hallazgos de las excavaciones del Grupo F. En el Grupo F, las excavaciones mostraron una alta actividad constructiva, con material definitivamente Preclásico. La construcción de su elevada plaza que ocupa el extremo norte, revela la importancia de este espacio dentro de la arquitectura del sitio y será interesante lograr vínculos con el proceso constructivo de todo el asentamiento.

Al momento, el hallazgo más interesante ha sido que el Grupo H Norte y la pirámide radial al oeste funcionaran probablemente como un observatorio solar. Los enormes mascarones conservados en la fachada oeste de la Plaza Alta necesitan más investigación, pero están ya bajo discusión y análisis de su iconografía. Sin dudas todas estructuras del Grupo H Norte tienen un potencial grande para ampliar nuestro conocimiento de la cosmología e ideología del Preclásico Tardío.

Por su lado el Grupo C muestra su primera ocupación, aunque aún por demostrar con certeza, por medio de una estructura encontrada al sur de la Estructura C-IV. Esta construcción tuvo una orientación diferente a la registrada en la construcción del Clásico Tardío y que fue orientada para ese momento hacia el sur. Hacia el Grupo G, vemos evidencia del Preclásico Tardío restringida a un chultun. Si bien las construcciones estudiadas fueron mucho más tardías, será interesante localizar en el futuro la ocupación Preclásica en esta zona y así tener una muestra sincrónica del desarrollo de este interesante grupo.

EL CLÁSICO TEMPRANO

Sorprendentemente en el Grupo H Norte hemos encontrado cerámica que definiremos por el momento como “transicional”. El material cerámico está compuesto en su gran mayoría por tipos del Preclásico Tardío (ya sea los tipos característicos Sierra Rojo, Laguna Verde Inciso, Polvero Negro, Flor Crema y Boxcay Café). Sin embargo, aunque muy discreta, es relevante la presencia de tipos y formas Tzakol en pequeña cantidades (principalmente Águila Naranja, bases anulares y ángulos en “Z”), además de algunas formas conocidas como protoclásicas, en particular bordes en gancho, y un fragmento de cuenco de tipo Sacluc Negro sobre Naranja. Estos datos indican sin mayor duda que la última ocupación y abandono del complejo puede fecharse para una época transicional entre finales de Chicanel e inicios de Tzakol. Sin contar aún con un análisis completo de los lotes que pueden datarnos con seguridad la construcción de los edificios del Grupo H Norte (asumida por el momento como Preclásica Tardía), sí podemos afirmar que éstos fueron ocupados y abandonados durante la transición de Chicanel a Tzakol. En otras palabras, esto significa que, aunque las estructuras fueron construidas durante del Preclásico Tardío, los habitantes de Uaxactun utilizaron el área durante los primeros años del Clásico Temprano. La ocupación del Grupo H en esta época de transición es muy interesante en varios niveles de investigación y revela nuevos datos sobre un área altamente importante dentro del asentamiento de Uaxactun y su historia política. De particular interés será el dilucidar el proceso de abandono del Grupo H Norte, diferente en primera instancia a lo propuesto con anterioridad para el Grupo H Sur al final del Preclásico Tardío y en donde se planteó una mudanza completa de la actividad ocupacional hacia el Grupo E (Valdés, Fahsen y Escobedo 1999:20). Según nuestros resultados es posible que el Grupo H Norte y el Grupo E coexistieran en su ocupación durante las primeras décadas del Clásico Temprano.

En el Grupo C, la ocupación parece continuar en la Estructura C-IV, esta vez en vista de la presencia de una estructura perfectamente estucada que mostró al menos dos momentos constructivos. Siguiendo la alineación de una estructura anterior (mencionada arriba), este edificio encaró posiblemente hacia el norte, quizás en relación a otra estructura localizada en esta dirección. Por investigaciones anteriores, sabemos que durante el Clásico Temprano esta área tuvo una ocupación importante y que podría relacionarse a las élites gobernantes del sitio para esta época. Este es el momento de construcción de la Estructura C-VII (según nuestros datos preliminares), y bien parece ser que el grupo sufrió entonces un auge constructivo.

EL CLÁSICO TARDÍO

El Clásico Tardío fue en todo caso un periodo de constante actividad en el Grupo C. La Estructura C-IV mostró entonces la construcción de la plataforma que sellaría la construcción anterior, realizándose la colocación de una ofrenda (Op. 2 Subop. B, Rasgo #4) y posiblemente al mismo tiempo, la colocación de un entierro (SAHI – 02/09). La nueva plataforma pudo bien permanecer tal cual por algún tiempo antes de ser extendida su construcción, levantándose la Estructura C-IV Final, ya con sus muros y su banca. Pero hacia tiempos Tepeu 2, esta estructura fue abandonada, y en un evento que aún no podemos localizar en el tiempo en relación al abandono mismo del edificio, un último entierro fue colocado (SAHI – 01/09) rompiendo la banca y el piso del cuarto. Las características que acompañaron la intromisión de este último rasgo, nos hacen sospechar la presencia de un tercer entierro, con lo cual, y de ser cierto, marcarían un patrón funerario interesante en un tipo de estructura bastante particular dentro de lo que conocemos actualmente de los edificios de Uaxactun.

En el antiguo Grupo F, la ocupación del Clásico Tardío estuvo limitada –por el momento– a la Estructura F-XII que podemos calificar como plataforma-altar o altar-plataforma. Además de la ofrenda de cerámica sobre su eje, es importante mencionar ciertas líneas picadas en la superficie del piso estucado de la plaza, así como grupos de pequeños hoyuelos. Las líneas y los hoyuelos se encontraron sobre todo al este de la estructura y continuaron hacia partes no excavadas en lados de la plataforma. Este tipo de signos podemos quizás comparar con los hoyuelos de las cruces punteadas o “pecked cross” encontrados en la Estructura A-V en Uaxactun y argumentar en un futuro una significación astronómica (Aveni 2003:170-171). Para una respuesta definitiva todavía faltan excavaciones más amplias y una evaluación arqueo-astronómica.

Mientras tanto, y hacia el Oeste del sitio, el Grupo G mostró su periodo de mayor actividad y ocupación. Aunque durante la primera temporada nuestros esfuerzos se enfocaron en el mapeo e identificación de esta área, las excavaciones proyectaron ya los primeros datos de su historia. Al momento, las tres secciones del Grupo G parecen mostrar una misma época de ocupación datada para el Clásico Tardío. Gracias a la presencia de dos entierros y el chultun en la estructura G-II, tenemos ahora evidencias muy interesantes sobre la vida de “nobleza” en este lugar. Encontramos también una flauta antropomorfa, obsidiana verde (como evidencia de comercio a distancia), un diente incrustado y fragmentos cerámicos que incluyeron inscripciones jeroglíficas. En vista que los otros sectores del Grupo G cuentan con edificios más grandes y elaborados que el Grupo G Oeste, podemos suponer que en el área reconocida del Grupo G vivió gente de un nivel social muy alto. Los huesos de los entierros serán analizados con C14 y los resultados serán comparados con la tipología de la cerámica recuperada en el grupo.

Luego de nuestra Primera Temporada de Campo, el Proyecto Arqueológico SAHI-Uaxactun, del Instituto Eslovaco de Arqueología e Historia, se encuentra complacido por los resultados de las investigaciones en Uaxactun. Esperamos que sea éste el inicio de una larga cooperación entre nuestros países y una oportunidad para el intercambio académico entre distintas tradiciones de investigación arqueológica. Agradecemos la colaboración y apoyo de los directores del SAHI en Eslovaquia, de IDAEH en Guatemala, de nuestro patrocinador el Sr. Zoroslav Kollár, al Dr. Héctor Escobedo, al Lic. Juan Carlos Pérez y al Cónsul Honorario de la República Eslovaca en Guatemala, el Sr. Fernando Montúfar.

REFERENCIAS

Acevedo, Renaldo; Zoila Calderón y Bernard. Hermes

1992        Rescate arqueológico en el Grupo D, Uaxactun, Petén. En V Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1991 (editado por J.P. Laporte, H. Escobedo y S. Brady), pp.120-130. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.

Arnauld, Marie Charlotte

2001        La “Casa Grande”: evolución de la arquitectura del poder del Clásico al Postclásico. En   Reconstruyendo la ciudad maya: el urbanismo en las sociedades antiguas (editado por A. Ciudad, M. Iglesias y M. Martínez), pp.363-401. Sociedad Española de Estudios Mayas, Madrid.

Arredondo Leiva, Ernesto

s.f.        Archaeological investigations of a walled compound at Naachtun, Petén, Guatemala: architecture, politics and warfare. Tesis de Doctorado, Escuela de Estudios Históricos y Europeos, Universidad La Trobe, Australia.

Arredondo Leiva, Ernesto y Milan Kovác

2008        Propuesta de Investigación Proyecto Arqueológico SAHI-Uaxactun. Instituto de Antropología e       Historia, Guatemala.

Aveni, Anthony

2003        Maya Calendar Reform? Evidence from orientations of specialized architectural assemblages.    Latin American Antiquity 14:159-178. Washington DC.

Braswel, Geoffrey (editor)

2003        The Maya and Teotihuacan. Reinterpreting Early Classic interaction. University of Texas Press, Austin.

Cohodas, Marvin

1980        Radial pyramids and radial-associated assemblages of the Central Maya Area. The Journal of the Society of Architectural Historians 39(3):208-223.

Freidel, David y Linda Schele

1988        Kingship in the Late Preclassic Maya Lowlands: the instruments and places of ritual power. American Anthropologist 90(3):547-567.

Kováč, Milan

2002        Slnko jaguára. Náboženský svet Olmékov, Mayov a Aztékov. Chronos, Bratislava.

Laporte, Juan Pedro

1986        El Grupo B, Uaxactun, Petén: Reporte Arqueológico. En Reporte arqueológico de las exploraciones realizadas en Uaxactun durante 1983-1985 (editado por J.A. Valdés), pp.1-59. Instituto de Antropología e Historia, Guatemala.

1989        El Grupo B, Uaxactun: arquitectura y relaciones sociopolíticas durante el Clásico Temprano. Memorias del II Coloquio Internacional de Mayistas 1, pp.625-646. Centro de Estudios Mayas, Universidad Autónoma de México, México DF.

2001        Dispersión y estructura de las ciudades del sureste de Petén. En Reconstruyendo la ciudad maya: el urbanismo en las sociedades antiguas (editado por A. Ciudad, M.J. Iglesias y M. Martínez), pp.137-161. Sociedad Española de Estudios Mayas, Madrid.

2005        El Grupo B de Uaxactun. En El Periodo Clásico en Uaxactun, Guatemala (editado por J.A. Valdés), pp.93-134. Universidad de San Carlos de Guatemala, Guatemala.

Morley, Sylvanus

1916        Year Book 15, pp.339-340. Carnegie Institution of Washington, Washington DC.

1922        Year Book 21, pp.310-318.Carnegie Institution of Washington, Washington DC.

1937-38The Inscriptions of Peten. Publication 437. Carnegie Institution of Washington, Washington, DC.

Puleston, Denis

1974        Intersite areas in the vecinity of Tikal and Uaxactun. Mesoamerican Archaeology, 303-312.

Ricketson Jr, Oliver y Edith Bayles Ricketson

1937        Uaxactun, Guatemala, Group E, 1926-1931. Publicacion 477. Carnegie Institution of Washington, Washington DC.

Ruppert, Karl

1934        Explorations in Campeche. En The Carnegie Institution of Washington. Year Book No. 33, pp.93-95. The Carnegie Institution of Washington, Washington DC.

Schele, Linda

1998        The iconography of Maya architectural facades during the Late Classic Period. En Function and meaning in Classic Maya architecture (editado por S. Houston), pp. 479-517. Dumbarton Oaks, Trustees for Harvard University, Washington DC.

Schele, Linda y Miller, Mary, E.

1986        The Blood of Kings. Dynasty and ritual in Maya art. George Braziller, New York.

Schele, Linda y David Freidel

1990        A Forest of Kings. The untold history of the Ancient Maya. Quill William Morrow, New York.

Smith, Ledyard

1950        Uaxactun, Guatemala: Excavations of 1931-1937. Publication 588. Carnegie Institution of Washington, Washington DC

Stuart, David

2000        The arrival of strangers. Teotihuacan and Tollan in Classic Maya History. En Mesoamerica´s Classic heritage: from Teotihuacan to the Aztecs (editado por D. Carrasco, L. Jones y S. Sessions), pp.465-513. University Press of Colorado, Boulder.

Taladoire, Eric

2001        The architectural background of the Pre-Hispanic ballgame: an evolutionary perspective. En The sport of Life and Death: the mesoamerican ballgame (editado por M. Whittington). Thames and Hudson, New York.

Valdés, Juan Antonio (editor)

1986        Reporte arqueológico de las exploraciones realizadas en Uaxactun durante 1983-1985. Instituto de Antropología e Historia, Guatemala.

1987        Estado actual de las investigaciones en Uaxactun, Guatemala. En Memorias del Primer Coloquio Internacional de Mayistas 1, pp. 383-392. Universidad Autónoma de México, México DF.

1989        El Grupo H de Uaxactun: evidencias de un centro de poder durante el Preclásico. En Memorias del Segundo Coloquio Internacional de Mayistas 1, pp. 603-623.Universidad Autónoma de México, México DF.

1992        El crecimiento de la Civilización Maya en el área central durante el Preclásico Tardío: una vista desde el Grupo H de Uaxactun. En Utz´ib 1(2):16-31. Asociación Tikal, Guatemala.

2005        El Periodo Clásico en Uaxactun, Guatemala. Arqueología en el Centro de Petén (editado por J.A. Valdés). Instituto de Investigaciones Históricas, Antropológicas y Arqueológicas, USAC, Guatemala.

Valdés, Juan Antonio y Federico Fahsen

1995        The reigning dynasty of Uaxactun during the Early Classic. Ancient Mesoamerica, 6: 197-219. Cambridge.

2004        Disaster in sight: the Terminal Classic at Tikal and Uaxactun. En The Terminal Classic in the Maya Lowlands: collapse, transition and transformation (editado por A. Demarest, P. Rice y D. Rice), pp.140-161. University Press of Colorado, Boulder.

Valdés, Juan Antonio; Federico Fahsen y Héctor Escobedo

1999        Reyes, tumbas y palacios. La historia dinástica de Uaxactun. Cuaderno 25, Centro de Estudios Mayas. UNAM e IDAEH, México DF.

Figura 1        Localización de Uaxactun en las Tierras Bajas (Dibujo por Ernesto Arredondo, basado en Peter Mathews).

Figura 2        Mapa de Uaxactun (Graham 1984).

Figura 3        Perfil del juego de pelota resaltando las diferencias encontradas por SAHI (A) en comparación con los datos de la Carnegie Institution (B) (Dibujo R. Barrois y Milan Kovác).

Figura 4        Mapa topográfico del Grupo G (Dibujo de Martin Nagy y Branislav Kovár 2009).

Figura 5        Planta del Entierro # 1 (SAHI-01/09). Estructura C-IV. UAX 2B-3-12 y 2B-4-13 (Dibujo M. De León, digitalización E. Arredondo).

Figura 6        Perfil de la excavación en la Estructura H-I, Perfil norte (No.10-11, 13-14) Op. 5-Sub.A unid. 5-8 (M. Hanus 2009).

Figura 7        Corte Norte-Sur de la Estructura H-III (Dibujo M. Pellecer, digitalización E. Arredondo) SAHI-Uaxactun 2009.

Figura 8        Parte central del mascaron encontrado en la fachada oeste de la Plaza Alta del Grupo H Norte (Dibujo M. Kovác).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *