09. Resultados de la 11a temporada de campo del Proyecto Aqueológico El Zotz

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Resultados de la 11a temporada de campo del Proyecto Aqueológico El Zotz

Desde el Periodo Preclásico Medio, el Valle de Buenavista estaba ocupado por el sitio El Palmar, un sitio ubicado a 4 km al este de El Zotz y a 17 km al oeste de Tikal, tenía construcciones arquitectónicas monumentales, como un Grupo Tríadico ubicado en el eje norte-sur del sitio, a la orilla de una gran laguna, construido en la transición del Preclásico Medio hacia el Preclásico Tardío, asimismo un Grupo “Tipo E” de 23 m de altura y otros edificios de connotación administrativa y ceremonial (Doyle y Piedrasanta 2012). El sitio fue investigado por el PAEZ en años anteriores, sin embargo, este año se retomaron las investigaciones con el propósito de ampliar la información sobre el mismo.

Durante la temporada 2016 se continuó el trabajo de reconocimiento y mapeo dentro del Biotopo San Miguel la Palotada. Omar Alcover, con el apoyo de José Chávez y Oscar Cac ambos pobladores del pueblo cercano Cruce Dos Aguadas, ampliaron el mapa al noreste del Grupo E de El Palmar. El trabajo se llevó a cabo usando una estación total marca Topcon modelo 230W, creando un mapa topográfico de las estructuras y modificaciones en el paisaje circundante. Como resultado, se documentaron 12 estructuras, tres plataformas, al igual que una calzada con una orientación suroeste-noreste.

El área de reconocimiento y mapeo se escogió en base a áreas de interés delimitadas por los datos de AIRSAR. Al noreste de El Palmar se encontraron doce montículos, seis de la cual fueron colocados encima de plataformas altas, y otras seis plataformas que no cuentan con superestructuras. Estas plataformas modificadas miden aproximadamente entre 25 y 70 m de largo y entre 4 a 6 m de alto, mientras que los montículos miden alrededor de 1.5 m de altura. Es posible que estas áreas modificadas sean espacios residenciales que fueron adaptadas para que quedaran por encima del nivel de agua si llegase a salir de su cauce la laguna. También hay varias de estas áreas modificadas que no contienen montículos visibles en la superficie, lo cual puede indicar que a lo mejor existían estructuras perecederas.

La calzada identificada corre desde el suroeste, saliendo de una pequeña plaza, en dirección hacia el noreste, terminando en un montículo a las orillas de la Laguna El Palmar, conocido también como “Templo del Agua”. Desde la superficie se puede observar que los mayas antiguos usaron el terreno natural a su favor, elevando la calzada solo en áreas donde existía un declive en el terreno. La calzada corre entre áreas que parecen ser de grupos residenciales, moviéndose entre la laguna y áreas ceremoniales importantes tal como el Grupo Tríadico y el Grupo E. Como parte de la documentación del sitio de El Palmar, se completó un perfil que cubre todo el Grupo Tríadico desde los montículos al oeste del grupo hacia la orilla de la laguna ubicada al este.

Asimismo las investigaciones en El Palmar, dirigidas por Thomas Garrison con el apoyo de Henry Pérez, se enfocaron en la Estructura D5-1 ó pirámide oeste del Grupo Tríadico del sitio. Hay tres saqueos pequeños en la cima de la pirámide pero el basamento no fue depredado. La Estructura E5-1 es una pequeña adición al frente de la pirámide que contenía el Entierro 3 de El Palmar, lastimosamente saqueado, que fue documentado por James Doyle en el año 2011. Por la presencia de este pequeño montículo fue necesario excavar una trinchera profunda para llegar a un piso que se pudiera seguir e iniciar un túnel. Cuatro pisos asociados a la versión final de la pirámide y sus modificaciones fueron encontrados, hasta que se ubicó un piso cortado que corría hacia el oeste, por debajo de la escalinata de la versión final. El relleno del edificio era muy peligroso mayormente constando de piedras de pedernal suelto, por lo que fue necesario embonar los muros del túnel para prevenir su colapso. El piso topó con una grada de estuco bien conservado, misma que se continuó al norte con la expectativa de localizar mascarones en el edificio, aunque no se logró ubicar el final de la escalinata, que hasta el momento mide 9 metros desde el eje central. En 2017 se pretende finalizar esta sección y continuar con los objetivos propuestos.

Posteriormente, durante el proceso de excavación, al frente de la Estructura D5-1 se descubrió una ofrenda dedicatoria. Inicialmente se encontró el esqueleto de un perro debajo de un plato. Luego se ubicó un segundo perro mezclado con tiestos de dos vasijas quebradas. Después de levantar los dos entierros caninos anteriormente mencionados era indiscutible que había otra vasija grande en el perfil sureste de la trinchera. Con la limpieza de estos rasgos se descubrió una ofrenda grande de siete vasijas más, dos conchas Spondylus, una cuenta de jade, y un núcleo de obsidiana. Cuatro de las vasijas fueron puestas en estilo labio-a-labio y las dos parejas contenían entierros que serán posteriormente sujetos de estudio por el Dr. Andrew Scherer, quien a simple vista cree que estos entierros puedan contener los restos de infantes.

Durante este proceso de excavación, se contó con el apoyo del conservador del Proyecto, Edwin Pérez, para estabilizar las piezas; y evitar que el cambio de clima y el ambiente no fueran tan bruscos y para mantener la humedad, se embalaron las piezas con arena cernida del mismo contexto; la vasija de mayor tamaño fue necesario colocarle una venda auto adherible alrededor como medida preventiva antes de ser movida por la presencia de grietas.

En síntesis, la combinación de la ofrenda con niños en vasijas labio-a-labio y el descubrimiento de una calzada al noreste de El Palmar confirmaron los enlaces fuertes entre este sitio y El Zotz. El patrón del sacrificio de niños en ofrendas está bien establecido en El Zotz, especialmente en el Grupo El Diablo y el Entierro 9, famoso por la tumba real encontrada en 2010. Con la calzada nueva parece que el mapa de El Zotz fue diseñado para replicar el asentamiento de El Palmar que fue establecido antes en el Preclásico. Estas observaciones refuerzan la teoría que fueron los mismos pobladores que abandonaron El Palmar y se establecieron en El Zotz durante la transición del Preclásico Tardío al Clásico Temprano.

Asimismo, otra investigación en El Palmar, fue dirigida por Henry Pérez, enfocándose en la exposición de arquitectura en trincheras de saqueo, llevando a cabo limpieza y registro de las mismas. Se logró identificar dos etapas constructivas, asimismo las diferentes modificaciones de niveles de pisos de estuco. Un rasgo particular, fue el hallazgo de un canal de piedra, que recorre el interior de la plataforma tríadica, con una longitud aproximada de 8 m. Su altura fue de 0.45 m, y 0.50 m de ancho en promedio ya que este canal en su recorrido era más alto o angosto en algunas secciones. El techo fue construido con piedra laja de gran tamaño depositadas en forma horizontal, sus paredes lo conforman piedras lajas medianas colocadas de forma vertical y embonadas con una mezcla posiblemente de lodo y cal, su base lo constituye un piso estucado de alguna nivelación anterior a la construcción del canal. Al extremo norte de este canal, fue identificado otro de menores dimensiones (alto 0.10 m y ancho 0.20 m) del cual no se logró conocer su longitud total. Bajo este sistema de drenajes se logró identificar un piso estucado que posee una pendiente hacia el este, que posiblemente se deba al manejo de agua pluvial de la plaza, evitando de ese modo inundaciones, drenando el agua en dirección del Templo del Agua y por ende a la laguna de El Palmar.

Para el periodo Clásico Temprano, de acuerdo a las investigaciones realizadas desde el año 2009, se ha tratado de comprender quiénes fueron los pobladores que se asentaron en El Zotz, en este sentido, se ha logrado establecer las relaciones mencionadas anteriormente entre el sitio El Palmar y el grupo el Diablo de El Zotz, donde se cree se establecieron los pobladores de El Palmar durante el Clásico Temprano posiblemente por razones defensivas, pero también de control sobre el valle, notable desde la Estructura F8-1. Este grupo se ubica en sobre un cerro a 1 km al oeste de la Acrópolis de El Zotz, es un grupo con enfoque en actividades cívico-ceremoniales de las élites reales alrededor de El Zotz cerca de la transición entre el Preclásico Tardío y el Clásico Temprano, tal como lo ha sugerido Edwin Román y Sarah Newman “es posible que estos sitios encima de los cerros fueran establecidos como cortes reales, fácilmente defendidos” (Román y Newman 2011).

De las 21 estructuras que conforman este grupo, 6 han sido investigadas intensivamente, F8-1 ubicada al sureste del mismo y el conjunto El Palacio ubicado al norte, conformado por 5 estructuras F8-6, F8-7, F8-8, F8-9 y F8-10.

Específicamente, la Estructura F8-1, posee varias fases constructivas, de las cuales dos aparentemente, estaban adornadas con mascarones polícromos. La primera subestructura, la cual está bien preservada, se encontraba decorada posiblemente con doce mascarones, de los cuales la mayor parte han sido excavados, documentados y conservados durante los distintas etapas de investigación realizadas por el PAEZ, éstos mascarones poseen representaciones del Dios Solar en sus distintas etapas, así como la representación de Chahk, el Dios de la Lluvia.

Durante la presente temporada de campo, las investigaciones en el conocido Templo del Sol Nocturno, fueron controladas por Danilo Hernández y Yeny Gutiérrez, quienes se centraron en conocer la iconografía representada en la esquina noreste de dicho edificio. Durante el proceso de excavación por medio de pozo se observó el mal estado de conservación en dichos muros que forman la esquina, por lo que solamente se logró liberar una parte, la cual fue documentada por medio de dibujos y fotografías, aún no se ha logrado definir claramente el significado que pueda tener esta iconografía, es posible que sea la representación de otro mascarón, por las similitudes con algunos rasgos.

Para la realización de esta excavación se contó con el apoyo de Edwin Pérez, encargado de la conservación de la arquitectura del sitio, con el apoyo de Hector Cervantes y Humberto Amador, dedicandose a estabilizar las partes frágiles del muro. Su trabajo también consistió en la conservación de los mascarones de estuco, con el fin de frenar el deterioro al que están expuestos.

Durante el proceso de conservación del estuco modelado, se ha logrado trabajar en un 80% de los mascarones, pero aún hay mucho por hacer, la estabilización es superficial y todavía persisten los problemas con raíces, como mayor foco de deterioro, estas se alojan entre la superficie de las paredes y el mascarón, al no estar expuestas directamente, es muy difícil llegar a ellas y eliminarlas.

Durante los años que se han efectuado trabajos de conservación se han utilizado los materiales que más se apegan a los constitutivos, cumpliendo con el principio de reversibilidad en todo momento, el resultado obtenido ha sido satisfactorio, y no se ha notado ningún cambio físico considerable. Como mortero se utilizó una pasta elaborada con cal, que se componen fundamentalmente de Hidróxido de Calcio como conglomerante, arena refinada, utilizando la misma arena caliza extraída de las excavaciones in situ, y como agente adhesivo natural se utilizó un aditivo orgánico que consiste en agua de Chaká o Chacá (Bursera Simaruba) la cual mejora la plasticidad de la mezcla, mediante el proceso de extracción de sus gomas naturales a través del remojo de su corteza.

Como medida de conservación se utilizó luz L.E.D. para protección de los pigmentos aun preservados en los mascarones, unas de las características de esta luz es la reducida emisión de calor en comparación con la luz alogena e incandescente, no es una luz radioactiva, con lo cual es mucho menos propensa a afectar la pigmentación conservada en los estucos.

Para protección del estuco de los muros del Templo del Sol Nocturno al momento de rellenar, se colocó Geotextil sobre la arquitectura y arena cernida obtenida de las excavaciones en medio de una pared de piedra y del textil.

También se han efectuado exámenes a fragmentos de estuco recuperados en el El Zotz, en el Centro de Investigaciones de Cementos Progreso, estos análisis Físico-Químicos, se pretenden continuar y servirán para comprender de mejor forma la composición de los mismos, el grado de pureza de la cal, así como los minerales presentes en el color.

De igual manera se realizaron investigaciones en el conjunto El Palacio, como continuación a las investigaciones realizadas desde el año 2013 en el mismo, el presente año el enfoque fue en la estructura F8-10 ubicada al sureste, este pequeño edificio, fue grandemente saqueado y durante el proceso de limpieza del saqueo ubicado en su fachada Este, se observó que los saqueadores lo realizaron en 3 niveles, es decir prácticamente dejaron un “cascarón de la estructura”, a pesar de ello no fue afectada la estabilidad de la misma. Este saqueo fue debidamente documentado y en el mismo se logró observar el relleno preparativo para una última etapa constructiva que no fue terminada, asimismo se observó al menos dos posibles cuartos ubicados en la cima de la estructura pertenecientes a la segunda etapa constructiva, la cual también demostró tener restos de estuco rojo que refuerzan la teoría que esta etapa estuvo decorada, de la misma manera que se observa en el Templo del Sol Nocturno; es posible que esta arquitectura fuera destruida intencionalmente por los zotzeños, porque los restos de estuco solamente se encontraron como parte del relleno en un estrato de tierra con ceniza y carbón en mayor parte al interior del pequeño grupo, lo que ya no fue tan notorio al exterior.

En esta misma etapa se reveló en una excavación por medio de túnel, un muro de bloques tallados sin estuco de aproximadamente 12.00 m de largo (de esquina oeste a esquina este), correspondiente a la fachada sur del edificio. Un rasgo importante de mencionar es que esta estructura presentó esquinas redondeadas, el cual no fue encontrado anteriormente en el sitio. Además es importante observar que el acceso a esta estructura se logró determinar por medio de pozos y pequeños túneles al lado oeste de la misma y no al sur como se creía, reforzando la teoría que este grupo era muy privado y con acceso limitado desde la Estructura F8-7 posiblemente por una escalinata central descubierta en el año 2009 por Edwin Román y Nick Carter (2009). De acuerdo a las excavaciones realizadas en el presente año se considera que estas estructuras estuvieron formadas por varios cuerpos que las unen entre sí a través de pequeñas escalinatas.

Finalmente en este grupo también se pudo identificar la etapa constructiva más temprana del edificio, donde la arquitectura resulta un poco confusa por la forma y amplitud de saqueo realizado.

Continuando con las investigaciones realizadas, el grupo Este de El Zotz despliega gran importancia, reflejada en su arquitectura. El grupo está relativamente aislado, pero está conectado al epicentro por la Calzada Este que se une a la gran plaza del sitio. Es posible que después de habitar en la cima del Cerro de El Diablo, la corte real se trasladara a este grupo, ubicado en una planicie donde están ubicadas las ruinas principales de El Zotz, incluyendo un complejo palaciego (Román y Newman 2011). Las investigaciones en el Grupo Este se han concentrado en la Estructura M7-1 o bien conocida como “Pirámide del Dintel de Madera”, este dintel actualmente puede ser observado en las instalaciones del Museo Nacional de Arqueología.

Para la temporada de campo de 2016, en la Estructura M7-1, se llevaron a cabo excavaciones en la última etapa constructiva, dirigidas por Rony Piedrasanta, con la finalidad de definir la arquitectura, para una etapa de registro y documentación con visión de una futura restauración.

En la parte Norte de la estructura se delimitaron dos trincheras (EZ-21H-1 Y EZ-21K-1) con el objetivo de determinar la cantidad de cuerpos del edificio, se logró establecer que la construcción fue en una sola etapa, además se pueden observar 9 cuerpos.

Para la fachada posterior del edificio (lado este) se delimitaron dos trincheras (EZ-21I-1 y EZ21I-2) el objetivo para estas unidades era determinar la arquitectura, debido a la dificultad que presentaba la inclinación y presencia de árboles, solamente se pudo evidenciar el piso de arranque de la estructura así como los tres primeros cuerpos. Tanto en las Trincheras del lado Norte y el Este, se observó la plataforma de sustentación.

En la fachada Oeste (fachada frontal), específicamente en el adosado central que posee, se pudo observar la escalinata central, que se encontraba sobre un piso estucado y que después le fue agregado otro piso estucado para nivelar la plaza. Los escalones consistieron en pequeños bloques de piedra caliza tallada, en promedio se puede observar huellas y contra huellas de 0.20 m.

Para la documentación gráfica del templo, se procedió con la limpieza de flora con el objetivo de tener visualización completa de los perfiles, no se pudo documentar el interior de los cuartos debido a que estos se encuentran sellados, para evitar su colapso. Además se observó el muro y el piso estucado de la plataforma suplementaria que soporta el mismo. El recinto mostró parte de la fachada, debido al derrumbe de la crestería y destrucción del primer cuarto. Las paredes laterales se encontraron más íntegras aunque presentaron grietas y saqueos, la parte posterior del templo en su mayoría ya no tiene muros de piedra tallada, se puede observar el relleno de piedra y argamasa, lo cual hace que esa parte se vea muy deteriorada. El edificio fue construido con muros y bóvedas de mampostería talladas y recubiertas de estuco, sin embargo en la actualidad solamente se pueden observar pequeños fragmentos de estuco en la pared de la parte posterior así como en las paredes del primer cuarto las cuales se encuentran expuestas.

Las excavaciones al interior de M7-1, dirigidas por Henry Pérez se llevaron a cabo por medio de la continuación del túnel iniciado la temporada 2015, donde durante la exploración no fue identificado otro rasgo arquitectónico más que un piso estucado que al final de la unidad estaba destruido.

Durante el periodo Clásico Temprano y Tardío sobresale el Grupo de los Cinco Templos, el cual tuvo una connotación funeraria, fue investigado durante esta temporada de campo por Ingui Zeceña y Jose Luis Garrido, específicamente enfocándose en la Estructura L8-13, el año pasado uno de los trabajos realizados fue la limpieza de la cámara funeraria tallada en la roca madre, localizada en el saqueo al Este del edificio. Se documentó la cámara funeraria tallada en la roca madre, la misma presentó banquetas talladas: dos al Oeste y una al Este con una concavidad poco profunda al centro, hacia el Norte un nicho y hacia el Sur se registró un tapón de rocas de caliza la mayoría de dimensiones grandes. Un detalle más representativo de la cámara es que se conservan y son visibles las huellas de la herramienta con la que fue tallada la roca. Partiendo de la Esquina SO de la cámara y siguiendo tanto el perfil como el piso, se comenzó un túnel con el propósito de localizar algún pasillo y algún tipo de ofrenda posterior a la colocación del cuerpo en la cámara y su sellado.

El túnel fue excavado con dimensiones iniciales de 0.80 m de ancho por 1.50 m de alto (alto de la cámara). Apenas a 0.40 m de excavación se localizó una grada tallada también en la roca madre. Un total de 5 gradas fueron localizadas; aproximadamente a 1.50 m de alto en el perfil Este se registró un estrato de pedernal, dos estratos más de pedernal fueron localizados y el relleno que acompañaba a los mismos era tierra café oscura, con pequeñas partículas de carbón y algunos pequeños fragmentos de caliza. La contrahuella de la quinta grada corresponde a rellenos de nivelación sobre la roca madre y sobre estos el piso, el cual estaba cortado y muy poca área fue visible.

Aproximadamente 1.00 m hacia el sur se localizó lo que posteriormente se denominó como una etapa constructiva anterior (0.90 m de alto y 8.06 m de largo) y su banqueta (0.90 de largo –los excavados– y 0.20 m de alto). El túnel tuvo un largo total de 8.90 m x 0.60 m de ancho y aproximadamente 1.50 m de alto.

Como complemento a las investigaciones realizadas el ingeniero Quentin Gautier, de la Universidad de California, San Diego, empleó tecnología de escaneo que está desarrollando en su programa de estudios. La meta fue probar tecnologías portátiles y de menos presupuesto pero igualmente funcionales en los túneles que el FARO LiDAR que se utilizó en los años previos para escanear túneles completos y mascarones. Se utilizó un Microsoft Kinect conectado a una laptop y una tabla Google Tango, ambos utilizando algoritmos de software que proporcionaron resultados e información en tiempo real visual. Los dos aparatos facilitaron resultados directos en el campo que todavía están bajo evaluación y también están en proceso para mejorar su precisión. También se logró la recreación de una gran porción del sistema de túneles en la Estructura M7-1 en un medio ambiente de realidad virtual directamente desde la salida de datos de Google Tango.

Finalmente también se contó con el arduo trabajo realizado por el equipo de Timothy Beach, Colin Doy-le y William Delgado quienes realizaron excavaciones en los alrededores de la Aguada de El Zotz. Durante dos temporadas de campo anteriores en El Zotz, las investigaciones se centraron en la referida aguada, un depósito grande. Se analizaron varias excavaciones en estratigrafía, geoquímica y microfósiles. Anteriores excavaciones descubrieron un piso clásico temprano bien elaborado, enterrado hasta 260 cm de sedimento erosionado. Después de estas investigaciones se notó por medio de imágenes de teledetección un punto de drenaje. Se espera que en un futuro se puedan realizar pruebas de muestras de carbón obtenidas en la aguada, de igual forma se pretende realizar evaluación geoquímica de sedimentos de la fuente y probar la hipótesis de que los mayas de El Zotz construyeron una represa con materiales como arcillas y sascab (embonado, relleno de cal, mezcla de caliza).

 

Conclusiones

Las investigaciones de la presente temporada en El Zotz fueron más puntales que en años anteriores, se enfocaron en continuar objetivos propuestos a mediano plazo, complementando la información obtenida durante 11 temporadas de Campo. Como proyecto estamos cerca de entender la conexión entre el sitio El Palmar y El Zotz y por ende al menos una parte importante de la historia del Preclásico al Clásico Temprano, lo cual contribuirá a comprender la complejidad de la región del Valle de Buena Vista. Al mismo tiempo, es obvio que nuevas interrogantes se tendrán en el futuro y que más investigaciones deberán ser desarrolladas. Y es obvio también que como Proyecto y demás instituciones involucradas en la protección de bienes patrimoniales debemos velar por el resguardo del entorno natural y cultural del Biotopo Protegido San Miguel la Palotada y el resto de la biosfera maya, este ano lamentablemente hubo muchos incendios, nuevos saqueos y presencia de campamentos de cazadores, lo cual continua siendo un problema que necesita una solución inmediata.

 

Referencias

Doyle, James y Rony Piedrasanta

2012   Excavaciones y reconocimiento en el sitio El Palmar (Capítulo 7). En Proyecto Arqueológico “El Zotz”: Informe No. 6, Temporada 2011 (editado por J. Garrido, S. Houston y E. Román). Dirección General del Patrimonio Cultural y Natural de Guatemala.

 

Román, Edwin y Nicholas Carter

2009   Operación 5: Excavaciones en el Grupo El Diablo, En Proyecto Arqueológico “El Zotz”: Informe No. 6, Temporada 2011 (editado por G. Perez, S. Houston y E. Román), pp.121-154 Universidad de Brown, Rhode Island, EEUU.

 

Román, Edwin y Sarah Newman

2011   Excavaciones en el Grupo El Diablo (Operación 5). En Proyecto Arqueológico “El Zotz”: Informe No. 5, Temporada 2010 (editado por J. Garrido, S. Houston y E. Román), pp.117-162. Dirección General del Patrimonio Cultural y Natural de Guatemala.