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85 – INVESTIGACIONES EN LA ZONA CULTURAL MIRADOR, PETÉN – Richard D. Hansen, Edgar Suyuc, Adriana Linares, Carlos Morales Aguilar, Beatriz Balcárcel, Francisco López, Antonieta Cajas, Abel Morales López, Enrique Monterroso Tun, Enrique Monterroso Rosado, Carolina Castellanos, Lilian de Zea, Adelzo Pozuelos, David Wahl y Thomas Schreiner – Simposio 19, Año 2005

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Hansen, Richard D., Edgar Suyuc, Adriana Linares, Carlos Morales Aguilar, Beatriz Balcárcel, Francisco López, Antonieta Cajas, Abel Morales López, Enrique Monterroso Tun, Enrique Monterroso Rosado, Carolina Castellanos, Lilian de Zea, Adelzo Pozuelos, David Wahl y Thomas Schreiner

2006        Investigaciones en la zona cultural Mirador, Petén. En XIX Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2005 (editado por J.P. Laporte, B. Arroyo y H. Mejía), pp.937-948. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala (versión digital).

85

INVESTIGACIONES EN LA ZONA CULTURAL MIRADOR, PETÉN

Richard D. Hansen

Edgar Suyuc

Adriana Linares

Carlos Morales Aguilar

Beatriz Balcárcel

Francisco López

Antonieta Cajas

Abel Morales López

Enrique Monterroso Tun

Enrique Monterroso Rosado

Carolina Castellanos

Lilian de Zea

Adelzo Pozuelos

David Wahl

Thomas Schreiner

Palabras clave

Arqueología Maya, Tierras Bajas, Guatemala, Petén, Cuenca Mirador, El Mirador, La Muerta, Tintal, Xulnal, complejidad política temprana, Reino Serpiente

STUDIES IN THE CULTURAL ZONE OF MIRADOR, PETEN

The archaeological studies in the Mirador Basin have focused on understanding the origin, development and collapse of the Preclassic Maya civilization, together with the conservation and preservation of the archaeological sites and their natural surroundings. This presentation will introduce the studies of the 2004 season that increased our knowledge of these natural and cultural processes. The mapping of the site’s central section continued using a total station. This offered a site perspective never seen before. Also, part of the archaeological work consisted of testing sites in the West Group in which there is data showing some evidence for the site’s collapse happening at the end of the Late Classic period. Furthermore, excavation pits at the main steps of Structure 34 show the singular importance of this building in the past and indicates the importance of implementing new means of conserving and consolidating Preclassic buildings.

Excavations carried out at La Muerta, El Mirador, include final work on Structures A1 and A2 where important information was obtained relating to the building’s architecture. Structure A2 was confirmed as being Early Classic with a network of passages allowing access to the inner funerary rooms for subsequent generations. Furthermore, the existence of a third level to the building was proved, smaller in dimension but with the same system of passages. Structure A1, beside A2, revealed important information about its function such as the existence of heads modeled in stucco in the upper room of the building. The presence of these heads suggests a representation of faces of Preclassic ancestors, implying a ritual function relating the location of these two structures in La Muerta.

The 2004 field season also produced final results in the consolidation and restoration accomplished in El Mirador, rescuing Preclassic and Classic buildings that were in imminent danger of collapse. The final process of architectural consolidation work at El Mirador implemented a vanguard methodology for the conservation of the buildings as well as the stucco artwork which allows at the same time the showing of Preclassic Maya architecture for educational and tourism purposes. This methodology proposes unique measures to date, using the same Prehispanic techniques and material, following a rigorous program of execution and monitoring. The preliminary results have shown very satisfactory evidence.

Indagar sobre los orígenes de la complejidad cultural en Mesoamérica es una actividad que tiene relativamente pocos lugares disponibles para resolver las preguntas científicas correspondientes. Sin embargo, sabemos que las sociedades complejas en Mesoamérica se originaron en el Altiplano Central y el Golfo de México, las Tierras Altas de Oaxaca y Chiapas, la Costa Sur de Guatemala y Chiapas, y las Tierras Bajas Mayas. El hallazgo de la complejidad temprana en las Tierras Bajas Mayas es relativamente reciente, pero gracias a las investigaciones de numerosos proyectos, existe una visión más amplia de la magnitud y la variedad de la complejidad social y política de la época Preclásica. Las investigaciones arqueológicas en la Cuenca Mirador están enfocadas en entender los orígenes, las dinámicas culturales de desarrollo y el colapso de la civilización Preclásica Maya, junto con la conservación y preservación de los sitios arqueológicos y su entorno ecológico. Las investigaciones arqueológicas de la Temporada 2004 aumentaron nuestro conocimiento de estos procesos culturales y naturales.

Ese ambicioso enfoque exige una perspectiva regional y multidisciplinaria, contando con la valiosa colaboración de muchas personas e instituciones para poder entender los acontecimientos culturales y naturales que se originaron en la zona. La Cuenca Mirador se encuentra directamente al norte de la ciudad de Flores, Petén. Los límites actuales de la Cuenca se extienden aún más al norte de la línea fronteriza y forman parte del sur del estado de Campeche en México. La Cuenca está definida por un marco natural formado por una sierra kárstica que forma los límites geográficos de la zona. Esta sierra kárstica consiste de montañas bajas en un rango de 100 a 200 m de alto, evidente en las fotos de satélite y aéreas, en especial por los lados norte, este, y sur de la Cuenca.

El hecho que la zona sea un sumidero con un borde elevado ha creado una concentración de bajos o pantanos, los cuales son perfectamente visibles desde satélites y/o vistas aéreas. Además, existe evidencia que el desagüe principal de la cuenca está orientado hacia el noroeste, al Golfo de México, por medio del río Candelaria. Tales detalles contribuyen a entender los mecanismos y esferas de interacción política y económica que pudieron haber sido responsables del desarrollo cultural en el área.

Hasta la fecha, las investigaciones del Proyecto Arqueológico Cuenca Mirador han logrado trabajar en 20 sitios de la zona, demarcando una concentración inusual de sitios de gran tamaño y antigüedad. Los estudios han identificado una fuerte ocupación del Preclásico Medio y un apogeo cultural en el Preclásico Tardío.

Por estudios anteriores se sabe que Nakbe tiene una fuerte ocupación del Preclásico Medio (Figura 1). Este sitio presenta plataformas, grandes edificios, amplias plazas, y una orientación este-oeste de la arquitectura conectada por medio de calzadas internas. Los depósitos primarios de cerámica del Preclásico Medio de Nakbe y otros sitios en la zona demuestran la variedad y diversidad de la cerámica temprana de la zona.

De esa manera, la cerámica presenta algunos indicios de la complejidad humana, con una referencia frecuente del petate o elemento “pop” inciso en el cuerpo o fondo de vasijas y sellos cerámicos. El símbolo pop fue un testigo de elementos reales en las sociedades Mayas más tardías y –si pudiera extrapolarse la misma relación hacia el Preclásico Medio– se presenta una mayor posibilidad de que las instituciones administrativas ya estuvieran establecidas en el Preclásico Medio en las Tierras Bajas Mayas. Hay evidencia que el “sistema de ajaw” fue establecido por lo menos en 300 AC, tal y como fue encontrado en investigaciones anteriores en depósitos sellados en la plaza de la pirámide El Tigre.

Los estudios epigráficos han mostrado los nombres y las fechas de nacimiento y de ascensión de algunos reyes ancestrales o mitológicos, como fuera mencionado en las tablas del Templo de la Cruz en Palenque y en un jade encontrado en Costa Rica. Resulta interesante la consistencia de las fechas más tempranas de estos individuos a lo largo del tiempo.

Por otro lado, las excavaciones extensivas en Nakbe han demostrado la presencia, en los niveles más tempranos, de los primeros pobladores de la zona entre 1000 y 800 AC. También es evidente que los sistemas rituales relacionados con la ubicación de monumentos de piedra fueron establecidos con seguridad para el periodo Preclásico Medio. Otra evidencia de los sistemas administrativos complejos se encuentra en la construcción de los Grupos del tipo E, los cuales representan la arquitectura ritual más antigua conocida hasta la fecha en las Tierras Bajas.

Figura 1  Mapa de Nakbe (PRIANPEG)

Se sabe que los mecanismos económicos para tal desarrollo cultural se basaban en la presencia de aguadas o pantanos húmedos que existían en la zona de la Cuenca Mirador. Todavía existen restos fósiles de estos sistemas antiguos. Los estudios efectuados anteriormente en Nakbe han demostrado la importancia de los sedimentos dentro de estos sistemas. El descubrimiento de campos agrícolas Preclásicos formados por lodo orgánico de las aguadas, establece el mecanismo por medio del cual los primeros gobernantes de las Tierras Bajas lograron financiar el desarrollo cultural que iba en proceso hacia la complejidad cultural no conocida antes en Mesoamérica.

Se sabe que para 300 AC, el sitio arqueológico El Mirador logró un tamaño y una complejidad cultural increíble (Figura 2). No sólo se logró la construcción de edificios grandes, sino de patrones arquitectónicos bien definidos y que consisten básicamente en el patrón triádico. Con una escala monumental única, representando un control de mano de obra impresionante y una administración de recursos, parece ser que El Mirador fue uno de los primeros estados políticos en el hemisferio.

La riqueza de tumbas de élite del Preclásico y la consistencia de cerámica Chicanel, son indicativo de una uniformidad cultural debido a la existencia de un poder centralizado o estatal sobre una gran parte de las Tierras Bajas Mayas. De hecho, la consistencia de la cerámica del Preclásico Tardío ha sido mencionada por casi todos los investigadores, y representa una de las esferas más uniformes en toda Mesoamérica. Sin embargo, hay evidencia de cambios evolutivos de la cerámica, y se cree que estos cambios también reflejan variantes culturales y adaptaciones al estrés de los sistemas políticos y económicos.

Figura 2  Mapa preliminar de El Mirador (Proyecto Arqueológico Cuenca Mirador)

En la zona de la Cuenca Mirador se reconoce el fenómeno de un colapso Maya, el que se dio poco hacia 150 DC, en lo que se conoce como el Colapso Preclásico. Por lo tanto, en la Cuenca Mirador existe la oportunidad única de investigar un sistema cerrado, integral, desde sus inicios y sus orígenes hasta su colapso. La razón para revisar este modelo es debido a que los estudios de polen que confirman la misma secuencia tal y como fue indicada en los estudios arqueológicos.

La consistencia de las muestras obtenidas en tres lagos en diferentes lugares de la cuenca, sugieren un patrón importante de ocupación y colapso, los cuales son muy evidentes en éstas. Por ejemplo, se sabe que el bosque tropical existió en Petén desde por lo menos 8000 AC. Sin embargo, el impacto humano al bosque parece mínimo hasta 1000 AC, cuando los árboles y arbustos empiezan a desaparecer y la presencia del Zea mays sp. comienza a ser muy fuerte. Esto demuestra claramente que hubo dos grandes ocupaciones, una en el Preclásico Medio, y la otra durante el Preclásico Tardío. La muestra de polen indica claramente la evidencia de un abandono después de cada gran ocupación Preclásica. El primero sucedió entre 400 y 300 AC, y el segundo entre 150 y 200 DC.

Para poder entender como se organizó el primer estado en las Tierras Bajas Mayas, es importante reconocer el papel de las calzadas antiguas. Estas calzadas tienen entre 30 y 40 m de ancho, y 1 a 3 m de alto. Las calzadas antiguas en El Mirador fueron construidas en el Preclásico Tardío para conectar importantes complejos arquitectónicos, así como para unir varios sitios a larga distancia. Se cree que las calzadas fueron la clave para la unificación política, económica y social entre todos los sitios mayores y menores de la Cuenca Mirador. Campos agrícolas asociados a calzadas facilitaban el transporte de productos y bienes comestibles hacia los sitios, especialmente al sur y oeste de El Mirador.

Uno de los sitios mayores conectado por una calzada con El Mirador fue el gran centro de Tintal, que consta de un centro cívico de 850 estructuras mayores, algunas de las cuales alcanzan hasta 50 m de alto. Además, sorprendentemente se descubrió una fosa artificial con un promedio de 15 m de ancho y hasta 8 m de profundidad. Fue construida probablemente en el Preclásico, lo que se hizo evidente por la presencia de residencias de ese periodo.

El centro cívico del sitio presentaba numerosas trincheras de saqueo en casi todos los edificios (2.56 trincheras por estructura). Por ejemplo, el Complejo Mano de León tiene más de 945 trincheras de saqueo, las cuales demuestran un daño increíble a la arquitectura mayor del sitio. Sin embargo, en los sitios que cuentan con vigilancia por parte del Instituto de Antropología e Historia, casi no se registraron trincheras de saqueo desde 1992, lo que nos enseña claramente la importancia de la vigilancia permanente en los sitios.

Otro hallazgo de importancia fue la presencia de una tumba de élite al pie de la Estela 1 del sitio, indicando la presencia de un guerrero que porta al menos tres calaveras y dos mandíbulas de tipo “trofeo”. Una de las placas de jade asociadas con este individuo expresó claramente que fue un “kan ajaw” o señor de Kan, o, alternativamente, un descendiente de tal individuo. Este hallazgo corresponde con el de un texto Preclásico Tardío, que también indica las palabras “kan ixiim” o “kan ajaw”. El texto, que se cree fue tallado durante el principio del Clásico Temprano, indica la presencia, sin duda, del nombre de Kan como el nombre de la zona. El nombre de Kan tiene antecedentes durante el Preclásico Tardío en la zona de la Cuenca Mirador; posiblemente era el nombre original de toda la región. Dicho nombre no funcionaba como nombre de un solo sitio, Kan fue entonces un nombre usado regionalmente. Estudios epigráficos de expertos indican también la historia retrospectiva de los primeros 19 gobernantes de la entidad Kan.

Los trabajos del 2003 y 2004 ampliaron enormemente nuestro conocimiento de la organización espacial de un sitio tan grande como El Mirador. Uno de los hallazgos importantes de la Temporada 2004 fue la presencia de un sistema de recolección de agua, ubicado en las inmediaciones de la gran plaza, al oeste de la pirámide León, que canalizaba el agua hacia las aguadas al pie de la escarpa. Además, el equipo de levantamiento topográfico detectó la presencia de diques pequeños que permitieron la entrada y salida de agua, probablemente para fines de control de sus fuentes de agua, especialmente en la aguada Limón al oeste de la pirámide El Tigre.

Otro hallazgo fue un sistema preciso de alineaciones arquitectónicas, las cuales indican que todo el sitio fue el resultado de una planificación estratégica (Figura 3). El sitio presenta una variedad de ángulos y líneas orientadas hacia varios edificios, plazas, estelas y complejos importantes de funciones rituales y posiblemente astronómicas.

Figura 3  Plano preliminar mostrando la alineación y planificación urbana de El Mirador

(Elaborado por Carlos Morales Aguilar)

Por otro lado, el lado oriental de El Mirador está dominado por el gran complejo de la Pirámide Danta, formada por tres enormes plataformas, la primera de 620 m de largo y 310 m de ancho. Estas tres plataformas sostienen una construcción en patrón triádico como estructura principal, desde la base de la primera plataforma hasta la parte más alta del templo principal que alcanza una altura de más 70 m. La evidencia arqueológica hasta la fecha indica que todo el edificio fue diseñado desde su primera grada, al pie de la primera plataforma hasta la cima, formando una de las estructuras antiguas más espectaculares en todo el mundo.

Una de las prioridades del proyecto Cuenca Mirador es la conservación y consolidación de arquitectura. La Temporada 2004 también produjo los resultados finales de consolidación y restauración llevados a cabo en El Mirador, rescatando edificios Preclásicos y Clásicos que estaban en peligro inminente de colapso. El proceso final de los trabajos de consolidación arquitectónica en El Mirador implementó una metodología vanguardista para la conservación de los edificios, así como del arte en estuco, que a la vez permita la exposición para fines educativos y turísticos del arte y la arquitectura del Preclásico Maya (Figura 4). Esta metodología propone medidas únicas hasta la fecha, utilizando las mismas técnicas y materiales prehispánicos, siguiendo un programa de ejecución y monitoreo muy riguroso. Los resultados preliminares están mostrando evidencias muy satisfactorias.

INVESTIGACIONES EN EL SITIO ARQUEOLÓGICO XULNAL

Las investigaciones realizadas en el sitio Xulnal de la Cuenca Mirador consistieron en el levantamiento del mapa preliminar completo del sitio (Figura 5). El sitio se encuentra al oeste de Tintal, y consiste en una meseta elevada con estructuras de hasta 40 m de alto. La cerámica recuperada hasta el momento indica una fecha del Preclásico Medio, lo cual sugiere la importancia de este sitio en el desarrollo cultural de la zona. Además, el sitio cuenta con un río con corriente permanente, lo cual merece investigación debido a que tal beneficio no resultó en una ocupación mayor en épocas posteriores. Las investigaciones en Xulnal establecieron que el sitio es más grande de lo que se conocía anteriormente, y se sugiere la necesidad de ampliar la protección del sitio.

Figura 4  Elementos en los que se dividió la parte del Mascarón Este de la Estructura 34

(Garra de jaguar), que fue consolidado durante la Temporada 2004

(Elaborado por Edgar Ortega y Enrique Monterroso R)

Figura 5  Mapa preliminar de Xulnal (Proyecto Arqueológico Cuenca Mirador)

EL MIRADOR – LA MUERTA

Las excavaciones realizadas en La Muerta, a 2.5 km al sur de El Mirador, incluyeron los trabajos finales de conservación de las Estructuras A1 y A2, donde se obtuvieron importantes datos relacionados con la arquitectura de los edificios. En la Estructura A1 se excavó y consolidó la cámara superior de la estructura, así como la fachada norte y oeste del edificio (Figuras 6a y b). Durante la excavación se revelaron datos importantes de su función, como la existencia de cabezas modeladas en estuco en la cámara superior del edificio (Figura 7). La presencia de estas cabezas sugiere la posible representación de rostros de antepasados Preclásicos e implica una función ritual relacionada al asentamiento de estas dos estructuras en La Muerta.

Figura 6a  Perfiles oeste y norte mostrando las intervenciones de consolidación en la Estructura A1

(Elaborado por Adelzo Pozuelos)

Figura 6b  Perfiles oeste y norte mostrando las intervenciones de consolidación en la Estructura A1

(Elaborado por Adelzo Pozuelos)

Figura 7  Cabezas de estuco localizadas en la Estructura A1, La Muerta (dibujo H. Iwamoto)

En la Estructura A2, ubicada al lado oeste de la Estructura A1 (Figuras 8a y b), se confirmó su construcción como un edificio del Clásico Temprano, con una red de pasillos que permitieron el acceso por generaciones subsecuentes a las cámaras interiores funerarias. Además, se comprobó la existencia de un tercer nivel del edificio de dimensiones menores pero con el mismo sistema de pasillos.

Figura 8a  Planta y elevación norte de la Estructura A2, La Muerta (elaborado por Adelzo Pozuelos)

Figura 8b  Planta y elevación norte de la Estructura A2, La Muerta (elaborado por Adelzo Pozuelos)

EPIGRAFÍA

Según los datos epigráficos obtenidos en la zona de la Cuenca Mirador, se desarrolló un estado político llamado el Reino Serpiente. Muchos textos del periodo Clásico hablan de una capital temprana del Reino Kan que fue muy importante durante las siguientes épocas. Aunque la Cuenca fue casi totalmente abandonada después del Preclásico Tardío, muchos reyes de otros sitios la veneraban como fuente de su dinastía. Los textos jeroglíficos informan que –para muchos de los reinos del Clásico– los reyes consideraban a la Cuenca Mirador como fuente de su cultura real y perduraba la memoria de la gran capital del Reino Serpiente.

AGRADECIMIENTOS

Los trabajos realizados en la Cuenca Mirador en 2004 fueron patrocinados por la Fundación FARES, Cementos Progreso de Guatemala, la Fundación Rosalinde y Arthur Gilbert, Alec Merrium, la Fundación Pi, la Fundación de Expresión Libre, y la Global Heritage Fund de San Francisco, entre muchos otros.

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