Categorías

34 Una perspectiva materialista acerca de las élites cortesanas Mayas: Contraste con la evidencia en los textos – Sarah E. Jackson – Simposio 18, Año 2004

Descargar este artículo en formato PDF

Jackson, Sarah E.

2005        Una perspectiva materialista acerca de las élites cortesanas Mayas: Contraste con la evidencia en los textos. En XVIII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2004 (editado por J.P. Laporte, B. Arroyo y H. Mejía), pp.381-388. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.

34

UNA PERSPECTIVA MATERIALISTA ACERCA DE LAS

ÉLITES CORTESANAS MAYAS:

CONTRASTE CON LA EVIDENCIA EN LOS TEXTOS

Sarah E. Jackson

Palabras clave:

Arqueología Maya, Guatemala, Petén, Cancuen, organización social, residencias de élite

Recientes estudios del corpus de textos jeroglíficos Mayas han mostrado nuevos detalles en la composición y naturaleza de un nivel alto de la jerarquía entre los Mayas antiguos: el de las élites cortesanas o no reales. Se conocen estos oficios de élite a través de sus procedimientos de sucesión, de la conexión con estructuras familiares, de las fuentes de su alto estatus y, también, de sus actividades. El próximo paso es conectar estas élites cortesanas que han sido identificadas mediante textos, con espacios físicos y objetos materiales para:

  • Ubicarlas dentro de los sitios en que vivieron y trabajaron
  • Investigar los materiales que se correlacionan con el alto estatus que evidencian según el registro escrito.

El propósito de investigar estatus en el registro material es hacer más complejos los índices tradicionales de marcadores sociales, como la altura de los montículos o la presencia de bienes de prestigio. Investigaciones importantes, como el trabajo de Joel Palka en Dos Pilas (1995), han mostrado que sólo mediante la evidencia material se puede contar con un perfil jerárquico de muchos niveles o, posiblemente, de un continuo de rangos sociales. Esta conclusión no es compatible con lo que se entiende en virtud del registro en los textos: ¿Resulta adecuado utilizar sólo restos materiales para indicar las sutilezas de rango? Un método alternativo consiste en utilizar como punto de partida los comportamientos de las élites, conocidos a través de los textos y dejados en restos materiales. Esta aproximación supone una perspectiva metodológica diferente al registro de estatus e indica la posibilidad de estatus basado en factores distintos a los bienes materiales. En esta ponencia se consideran algunos ejemplos para probar esta idea. Los resultados permiten pensar un poco en la emergente comprensión del elitismo entre los Maya antiguos.

CATEGORÍAS DE COMPORTAMIENTO DE LAS ÉLITES

A partir de frases verbales específicas en los textos jeroglíficos se puede derivar evidencia directa sobre comportamientos y actividades de las élites. Pasajes en los textos indican cuatro categorías de actividades de las élites cortesanas:

  • Actividades rituales (baile, conjuros, personificación de dioses, ritual de esparcir, juego de pelota).
  • Actividades de guerra (la captura de prisioneros).
  • Actividades políticas (ascenso al oficio).
  • Actividades de dedicación (de estructuras y monumentos).

Estas actividades están marcadas por requisitos – como lugares especiales, herramientas o equipos (baile y juego de pelota, por ejemplo), y por subproductos o desechos (como la quema en rituales o el enterramiento de escondites para ofrendas). Pero muchos de estos comportamientos específicos resultan problemáticos, ya sea por haber tenido lugar fuera del recinto del propio grupo, o por haber dejado muy pocos restos.

Sin embargo, estas actividades sugieren algunas categorías y características amplias del comportamiento de las élites (Figura 1). La primera categoría es la acción ritual y política pública. Muchas de estas actividades requieren un espacio especializado, indicando la necesidad de diferenciación espacial dentro de un grupo de élite. Además, parece necesaria una separación clara entre el espacio público y privado, para la realización de las funciones cotidianas domésticas (como dormir), y también los aspectos públicos del oficio cortesano (como recibir visitantes o auspiciar eventos rituales).

En segundo lugar, la información escrito indica que las élites cortesanas se interrelacionaban mediante redes sociales tanto con los gobernantes (descritos, gramaticalmente, como los “poseedores” de élite), como con individuos subordinados. El vínculo con la realeza – así como las responsabilidades que ello suponía – podría indicar proximidad o una conexión física directa de los grupos de élites cortesanos con el centro del sitio (por ejemplo, mediante un sacbe). En el caso de las conexiones de élites no reales con gente de estatus más bajo, la evidencia jeroglífica indica que había niveles de rango interno aún dentro de las élites cortesanas. Es probable que un agrupamiento residencial de las élites no reales muestre ejemplos de diferenciación de estatus respecto de las estructuras inmediatamente adyacentes al grupo, donde los partidarios o individuos subordinados estaban ubicados. La arquitectura grande o abovedada es también un indicio de la capacidad para controlar la mano de obra.

Otra clase de comportamiento aparente en los glifos es el estatus asociado adscrito en muchas de estas posiciones. La evidencia de los textos muestra que los lazos de parentesco jugaban un papel significativo en la sucesión dentro de estas posiciones, y que a menudo los oficios quedaban por mucho tiempo dentro de una misma familia; se pueden ver dinastías de élites cortesanas llevando el mismo apellido, por ejemplo, en El Cayo y Sak Tz’i’. Un caso parecido de la conexión entre el linaje y la posición oficial de la élite sería la ocupación prolongada, y de estatus alto, en un área residencial determinada.

La importancia de la habilidad de controlar textos e imágenes es otro indicador del comportamiento de estatus implícito en los jeroglíficos. Textos menos formales que los monumentos, como objetos portátiles e incluso la iconografía arquitectónica, podrían ser indicadores importantes en esta categoría.

En resumen, los rasgos característicos de las áreas residenciales de las élites se presentan aquí sobre la base de las categorías de actividades y comportamiento sugeridas en el registro jeroglífico. Si están presentes o no restos materiales que indican riqueza (en entierros, por ejemplo), la concurrencia de todas o varias de estas categorías tiene el potencial de identificar grupos de élite de estatus alto.

TRES CASOS CONOCIDOS DE LAS ÉLITES CORTESANAS

La manera más clara de probar esta idea consiste en examinar ejemplos en los que un complejo de élite está señalado en los textos como perteneciente a un individuo de élite. Hay pocos ejemplos conocidos:

  • Algunos de ellos están en Copan, en los Grupos 9N-82 (Webster et al. 1986; Webster 1989), y 9M-18 (o, CV-43; Leventhal 1979; Willey y Leventhal 1979), donde bancas con jeroglíficos describen al dueño de la estructura como ajk’uhun.
  • En Palenque, la Tableta del Palacio del Grupo IV (Rands y Rands 1961), presenta el Chak Sutz, sajal, bah ajaw, y yajaw k’ak’ (Schele 1991).
  • En Xcalumkin (Becquelin y Michelet 1992), dos estructuras diferentes están marcadas como pertenecientes a sajales.

Los ejemplos de Copan son los que se han excavado con mayor detalle, mientras que los ejemplos de Palenque y, especialmente, los de Xcalumkin, han sido poco investigados arqueológicamente. Los ejemplos de Copan y Palenque servirán como casos de prueba para determinar si las características de comportamiento elitista propuestas son útiles para grupos élites identificados.

Esta tabla muestra los resultados de este tipo de examen (Figura 2). Los dos grupos en Copan -claramente domésticos – tienen también una estructura que parece notablemente diferente en su uso (probablemente no residencial). La poca excavación en el Grupo IV de Palenque lo hace un caso indeterminado. Los ejemplos de Copan – con la combinación de cuartos centrales y laterales y, también de espacios encerrados, indican la presencia de distintos espacios públicos y privados, como el ejemplo de Palenque, que incluye un segundo piso encerrado que indica, sin duda, una área de acceso restringido.

Una conexión directa con el centro del sitio y también con el gobernante, está presente en ambos casos de grupos en Copan que están ubicados a lado de, o cerca, de sacbeob que salen del Grupo Principal. El grupo en Palenque está ubicado al lado oeste de la plaza principal.

La ocupación de larga duración, señalada por entierros fechados desde épocas más tempranas, es un rasgo notable en el Grupo 9N-82 de Copan (fechado hasta el Clásico Temprano), y el grupo en Palenque, donde la ocupación se extiende, por lo menos, por 350 años. Estos ejemplos apoyan la idea de que una familia de estatus alto vivió en estas áreas por un significativo periodo de tiempo. El Grupo CV-43 de Copan tiene, por lo menos, una fase más temprana, pero muestra, por lo general, poca profundidad temporal – el ocupante puede haber accedido a la posición más recientemente.

Finalmente, los rangos internos o, la habilidad de estas élites para mandar a otra gente, es evidente en los dos grupos de Copan, donde hay una serie de estructuras bajas y pequeñas alrededor de la plaza central del grupo élite – probablemente para partidarios y familia extendida, utilizadas como estructuras de servicio. El caso de Palenque es menos claro. Estos grupos contienen estructuras con una inversión de construcción significativa.

El control de texto y de imagen es muy claro en todas estas áreas: además de los monumentos que describen a las élites, en cada caso se ha encontrado escultura arquitectónica y/o textos portátiles. Algunos restos en este área – parte de un espejo en el estilo de la Costa del Golfo escondido frente a la Tabla del Palacio en Palenque y utensilios para jugadores de pelota guardados en una de las estructuras en Grupo 9N-8 en Copan, se relacionan directamente con las actividades rituales de las élites conocidas a partir de los textos. Además, se encontró una cantidad significativa de cerámica utilitaria, probablemente porque éstas eran áreas residenciales. Es importante recordar que, incluso en áreas de estatus alto, una alta concentración del material es de carácter utilitario.

En resumen, estos casos de prueba indican que, en su conjunto, las características sugeridas son las que se podrían esperar encontrar en las áreas residenciales de las élites, como indicadores de las categorías de comportamiento de las élites.

CASOS DE PRUEBA: PIEDRAS NEGRAS Y CANCUEN

Habiendo examinado los ejemplos en que los grupos residenciales están claramente marcados, ahora se examinan dos casos de prueba en los que no hay evidencia escrita de la pertenencia de estos grupos a élites no reales. La hipótesis es que la combinación de características de comportamiento elitista sugeridas ayudará a determinar si un grupo de plaza pudo haber sido utilizado por la élite o, posiblemente, por élites con título. Una desviación de estas características sugerirá una distinta caracterización del grupo.

El primer ejemplo es un grupo residencial en Piedras Negras (Figura 3; Guillot et al. 1999; Jackson 2001). Se trata de una plaza de tres estructuras en forma de “U”. Este grupo se orienta al oeste con una escalinata de entrada grande al lado externo de la Estructura C-10 que da acceso directo a la plaza interior del grupo, a través del edificio. Este acceso occidental probablemente se dio por la ubicación de este grupo al lado del sendero que entra al sitio desde el norte. Este sendero habría continuado hasta el corazón de la ciudad. Por otra parte, el grupo de patio tenía también una conexión visual notable con la acrópolis. Aunque la Estructura C-10 combinaba el acceso público con habitaciones privadas cerradas y con bancas, parece improbable que un edificio con acceso recto de un lado a otro fuera una residencia doméstica. La Estructura C-12, en el lado norte de la plaza, con bancas grandes y habitaciones parcial o completamente cerradas parece un mejor candidato para una residencia. La Estructura C-13 es un tipo diferente de estructura, posiblemente el monumento funerario de un jefe de linaje, con banquetas y con una superficie superior tan estrecha que no podía haber sostenido una súper-estructura. Se encontraron tres altares-columnas sobre las banquetas y un rico entierro fue colocada por debajo (con seis vasijas, seis cuentas de jade, una espina de raya, dos orejeras de concha y una navaja prismática). Se trató probablemente de una estructura funeraria, posiblemente del fundador de un linaje y un punto focal para el grupo entero.

También se encontraron otros entierros en la plaza fechada para el Clásico Temprano; lo cual indica el uso del lugar por largo tiempo. No habían concentraciones altas los desechos típicos de las casas (por ejemplo, utensilios de cocina o para elaborar comida; desechos líticos, etc); probablemente los montículos más bajos, ubicados inmediatamente al norte, fueron las estructuras de apoyo donde se llevaban a cabo estas actividades. Algunos otros artefactos encontrados se relacionan directamente con las conductas rituales de las élites. Estos incluyen: un escondite de dedicación debajo de la escalinata de C-12 y varias ofrendas dentro de las habitaciones, incluyendo vasijas, tambores y un hueso tallado con un texto jeroglífico. También se encontró una extraña serie de cabezas de animales hechas de cerámica, probablemente usadas para actividades públicas (políticas o rituales – tal vez como remates superiores de un estandarte o como títeres). En su conjunto, este grupo concuerda con los criterios definidos para identificar los comportamientos de las actividades de las élites y es muy semejante a los grupos élites claramente identificados mediante textos jeroglíficos. Su diferencia principal es que, mientras los montículos son grandes y de mampostería, la construcción de súper-estructuras corresponde a un estatus menos alto; faltan bóvedas y muros de mampostería completos.

Un segundo ejemplo de un sitio excavado que no tiene la confirmación escrita de la ocupación por élites cortesanas es el Grupo M9 en Cancuen (Figura 4; Jackson 2002, 2003). Este grupo, ubicado a la orillas del río Pasión, probablemente se conectaba con el puerto inmediatamente al sur. Esta área está dividida por un sacbe que enlaza directamente al centro del sitio. El grupo se ubica alrededor de una estructura grande tipo de palacio, M9-1, que combina un lado abierto en el este y un lado muy cerrado al oeste; también tenía un recinto de trono o área de recepción. Al este del M9-1, se encuentra una serie de estructuras más pequeñas y bajas. La Estructura M9-15 es la más grande de las estructuras al este, y mira directamente a M9-1. La colección de distintos artefactos y el gran número de individuos enterrados en un basurero posterior al edificio, hace pensar que se trataba de una residencia. Las otras estructuras del área se relacionaban con producción doméstica, incluyendo la preparación de comida y la fabricación de herramientas líticas; estas actividades se centraron en un piso de lajas. Dos de estas estructuras, al este, se fechan a una época un poco más temprana; sin embargo, la ocupación de este grupo no se prolongó por más de cien años (la falta de profundidad temporal es común en Cancuen). Se podría suponer que el individuo de más alto estatus de este grupo estaría enterrado en M9-1; se encontró una cista en el eje central de la estructura, pero estaba vacía. Dos entierros de niños, enterrados con cristales de cuarzo, se encontraron dentro de M9-1. Se trata, probablemente, de ofrendas realizadas en el momento de la construcción y asociadas con rituales de dedicación.

Por otra parte, el entierro más rico se encontró en una de las estructuras más humildes (y, también, una de las más tempranas). Esta persona fue enterrada con dos vasijas y una orejera de jade; tenía cuatro dientes incrustados con jade. Aunque no fueron encontrados textos jeroglíficos en este grupo, el M9-1 tenía elementos de estuco pintado y modelado, lo cual indica el control público de las representaciones iconográficas. Además, el hallazgo en la plaza del lado este de M9-1 de un machacador y un pulidor para orejeras de jade, sugiere actividades de producción de élite. El control de la producción de materiales tan especiales pudo haber sido parte de la esfera de supervisión de la persona que vivió aquí. Los basureros asociados con esta estructura de estatus alto incluyeron una cantidad significativa de cerámica utilitaria.

El Grupo M9 parece de élite en varias formas y satisface algunos de los criterios que indican comportamientos elitistas. Sin embargo, dos diferencias están claras, una es la falta de una estructura diferente de uso especial; la segunda es que la diferenciación en estatus de las estructuras es muy obvia, aunque de tipo diferente. Los edificios al este – basados en sus actividades de casa y de producción doméstica – corresponden con los tipos de estructuras de apoyo. Esto deja a la M9-1 como una estructura élite sostenida por sí misma (en vez de un grupo integrado de estructuras). Las características de comportamiento de élite propuestas sugieren un tipo diferente de organización doméstica o de comunidad en este caso, lo cual requiere otro modelo de explicación. Una hipótesis podría ser que los miembros de la familia real vivieron aquí – la mayoría de la familia vivía en el palacio, y por eso no necesitaban edificios adicionales aquí, y las estructuras especiales para rituales o asuntos oficiales habrían estado ubicadas en el centro del sitio también.

CONCLUSIONES

En este trabajo se consideró la posibilidad de examinar estatus y jerarquía en el registro arqueológico basado en registros escritos del comportamiento elitista que dejan rastros en el registro material. Este método podría ser un complemento o alternativa para la dependencia de marcadores materiales como la presencia o ausencia de bienes de prestigio, o de gran arquitectura, que ha mostrado ser potencialmente problemático en la correlación con la jerarquía socio-política indicada en los textos. El resultado es la identificación de varias categorías de correlaciones comportamiento-material que pueden ser relacionados con grupos residenciales de élite. Aunque puede ser que estas categorías no sean muy sorprendentes – y podrían aplicarse a grupos de élite sin título -, representan una posibilidad metodológica importante para llenar, mediante el análisis de las actividades y los comportamientos de élite, el vacío entre la evidencia escrito y material.

Este análisis de comportamiento y no solamente de objetos, es también importante porque ambas evidencias, escritas y materiales, sugieren que la riqueza material es sólo parte de la comprensión del fundamento del estatus de estas élites no reales. Mientras que los grupos aquí examinados son materialmente ricos en varios modos, no hay una gran abundancia de bienes de prestigio y se encontró una alta proporción de cerámica utilitaria con objetos domésticos y cotidianos. Además del control y propiedad de riqueza material, otros factores estaban claramente relacionados con el nivel elevado de las élites y con la importancia de estos individuos de estatus alto, de hecho, los textos explícitamente describen una variedad de otras fuentes del estatus de las élites, por ejemplo, los papeles cosmológicos en que estas élites cortesanas desempeñaron figuras como pahuatuns o remeros.

En resumen, factores de estatus tanto material como no material, contribuyeron a alcanzar la jerarquía de las élites. Las evidencias escritas y materiales estudiadas en conjunto iluminan los fundamentos de los conceptos del elitismo en los Mayas antiguos, y sugieren nuevas direcciones para identificar la jerarquía social y política en el registro arqueológico.

REFERENCIAS

Becquelin, Pierre y Dominique Michelet

1992        Proyecto “Xcalumkin en su trayectoria cronológica”: La temporada 1992. Mexicon 14 (6):113-118. Berlin.

Guillot Vasaux, Alejandro, Zachary X. Hruby y A. René Muñoz

1999        PN 41: Excavaciones en la Plaza Sur del Grupo C. En Proyecto Arqueológico Piedras Negras, Informe Preliminar 3 (editado por H. Escobedo y S. Houston), pp.151-170. Universidad Brigham Young.

Jackson, Sarah E.

2001        PN 41: Excavaciones en la Plaza Sur del Grupo C. En Proyecto Arqueológico Piedras Negras, Informe Preliminar 4 (editado por H. Escobedo y S. Houston), pp.117-156. Universidad Brigham Young.

2002        Operación 25A: Excavaciones en las Plazas Este de “El Volcán” (9M-1). En Proyecto Arqueológico Cancuen, Informe Preliminar 3 (editado por A. Demarest y T. Barrientos Q.), pp.129-152. Universidad de Vanderbilt, Nashville.

2003        Operaciones 25A y 25E: Excavaciones de M9-1 y las Plazas Alrededores. En Proyecto Arqueológico Cancuen, Informe Preliminar 4 (editado por A. Demarest y T. Barrientos Q.), pp.129-166. Universidad de Vanderbilt, Nashville.

Leventhal, Richard M.

1979        Settlement Patterns at Copan, Honduras. Tesis de Doctorado, Departamento de Antropología, Harvard University, Cambridge.

Palka, Joel

1995        Classic Maya Social Inequality and the Collapse at Dos Pilas, Peten, Guatemala. Tesis de Doctorado, Departamento de Antropología, Vanderbilt University, Nashville.

Rands, Barbara C. y Robert L. Rands

1961        Excavations in a Cemetery at Palenque. Estudios de cultura Maya 1:87-106. México.

Schele, Linda

1991        The Demotion of Chac-Zutz’: Lineage Compounds and Subsidiary Lords at Palenque. En Sixth Palenque Round Table, 1986, pp.6-11. University of Oklahoma Press, Norman.

Webster, David (ed)

1989        The House of the Bacabs, Copan, Honduras. Dumbarton Oaks Research Library and Collection, Washington, D.C.

Webster, David L., William L. Fash, y Elliot M. Abrams

1986        Excavaciones en el Conjunto 9N-8, Patio A (Operación VIII). En Excavaciones en el Área Urbana de Copan, Tomo I (editado por W. T. Sanders), pp.155-318. Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Tegucigalpa.

Willey, Gordon R. y Richard M. Leventhal

1979        Prehistoric Settlement at Copan. En Maya Archaeology and Ethnohistory (editado por N. Hammond y G. R. Willey), pp.75-102. University of Texas Press, Austin.

Comportamiento

Correlativo material esperado

Acción pública ritual/política

Presencia de una estructura especializada/diferenciada

Acción pública ritual/política

Espacio público y privado claramente diferenciado

Control del oficio por linaje

Ocupación del grupo por un largo periodo de tiempo

Lazo íntimo personal/oficial con el gobernador

Conexión física o proximidad al central del sitio

Control de los individuos de rango inferior

Rango/diferenciación de las estructuras adyacentes al grupo

Control de los individuos de rango inferior

Trabajo manual para la construcción de arquitectura grande/abovedada

Correlativo material esperado

9N-82, Copan

9M-18, Copan

Grupo IV, Palenque

Presencia de una estructura especializada/diferenciada

Desconocido

Espacio público y privado diferenciado

Ocupación del grupo por un largo periodo de tiempo

No

Conexión física o proximidad al centro del sitio

Rango/diferenciación de las estructuras adyacentes al grupo

Desconocido

Arquitectura grande/abovedada

Correlativo material esperado

Grupo C, Piedras Negras

Presencia de una estructura especializada/diferenciada

Espacio público y privado diferenciado

Ocupación del grupo por un largo periodo de tiempo

Conexión física o proximidad al centro del sitio

Rango/diferenciación de las estructuras adyacentes al grupo

Arquitectura grande/abovedada

Correlativo material esperado

Grupo M9, Cancuen

Presencia de una estructura especializada/diferenciada

No

Espacio público y privado diferenciado

Ocupación del grupo por un largo periodo de tiempo

No*

Conexión física o proximidad al centro del sitio

Rango/diferenciación de las estructuras adyacentes al grupo

Sí*

Arquitectura grande/abovedada

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *