22 EL PATRÓN DE ASENTAMIENTO DE UAXACTUN EN EL CLÁSICO TARDÍO Renaldo Acevedo y Ana María Paz Bone – Simposio 02, Año 1988

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Acevedo, Renaldo y Ana María Paz Bone

1991  El patrón de asentamiento de Uaxactun en el Clásico Tardío. En II Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1988 (editado por J.P. Laporte, S. Villagrán, H. Escobedo, D. de González y J. Valdés), pp.157-162. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala. 

22 

EL PATRÓN DE ASENTAMIENTO DE UAXACTUN EN EL CLÁSICO TARDÍO

Renaldo Acevedo

Ana María Paz Bone

 

El presente trabajo pretende enfocar la ocupación habitacional para el Clásico Tardío en el sitio Uaxactun, haciendo una relación de los grupos habitacionales encontrados en un área de 16 km² y la cerámica recolectada en dichos conjuntos a través de pozos de excavación realizados para tal fin en cada una de las plazas que integran los grupos habitacionales. Los datos presentados hoy, provienen de los trabajos de campo efectuados durante 1984 y 1985, específicamente en el sector ocupado por el área habitacional.

Se considera que una investigación más profunda en este sentido se hacía necesaria, pues aparte de las tres ya realizadas en los alrededores, el área habitacional continuaba prácticamente desconocida. La primera investigación fue realizada por Oliver Ricketson, durante 1929; para determinar el número, frecuencia, localización y posibles relaciones de cada uno de los montículos habitacionales y chultunes; con el único propósito de realizar una estimación de la población. Para este efecto, Ricketson realizó cuatro brechas que tuvieron una longitud de 1.60 km por 91.44 m de ancho cada una. Como resultado obtuvo un mapeo de 78 montículos y 50 chultunes (Ricketson y Ricketson 1937:15‑16).

La segunda investigación fue realizada a través de la Institución Carnegie de Washington a partir de 1931. Ésta no reveló mayores descubrimientos en el área habitacional porque sus fines no fueron orientados al descubrimiento del patrón de asentamiento en su totalidad. Los trabajos efectuados fueron enfocados a conocer cinco estructuras por medio de excavaciones efectuadas durante 7 semanas de la temporada de campo 1931‑32. «Wauchope invirtió una considerable parte de la temporada en hacer un examen muy cuidadoso de ciertas elevaciones pequeñas que creyó ser montículos caseros (habitacionales). Durante esa temporada excavó cuatro montículos por completo y el quinto fue examinado en menor escala» (Smith 1950:15).

Los anteriores montículos investigados, además de ser muy poca muestra para realizar un estudio de patrón de asentamiento, se encuentran ubicados casi en los límites de los Grupos Mayores A y B, el Montículo I y II se encuentran a 400 m al sur del Grupo A. Los Montículos III, IV y V estuvieron a 800 m al sureste del Grupo A (Wauchope 1934:132), lo cual les da un carácter elitista y no hacia el área de la periferia, en donde se encontraba viviendo la mayor parte de la población y que es donde se encuentran también los domicilios de los habitantes más modestos (Folan 1987). Básicamente los montículos referidos fueron estudiados para analizar características constructivas (Wauchope 1934).

La tercera investigación fue realizada por Dennis Puleston a través del Proyecto «área de sostén de Tikal», en el año de 1973 por medio de una brecha que partió de un banco de marca colocado por la Compañía Petrolera Shoran en Uaxactun. Su principal objetivo fue localizar centros menores ubicados entre Uaxactun y Tikal. En éste mapeo fueron localizados montículos aislados y pequeños grupos en las áreas más elevadas y sobre todo, se menciona un fuerte incremento de montículos en las áreas más cercanas a Uaxactun (Puleston 1973:117‑121). Nuestro trabajo pretendió en todo momento investigar tanto las áreas más alejadas de los Grupos Mayores cómo las más cercanas. Ya que solamente así se podría delimitar la expansión del sitio y los estadios ocupacionales para los grupos habitacionales y con ello tener una información más amplia del patrón de asentamiento.

EL MEDIO AMBIENTE

Uaxactun se encuentra localizado al noreste del departamento de Petén, Guatemala. El noreste del Petén se encuentra entre las latitudes Norte 16º 90′ y 18´´. El clima del trópico se caracteriza por altas temperaturas y una estación muy lluviosa (Lundell 1937:6).

El clima de Uaxactun, durante la época cálida es seco y registra las mayores temperaturas, hay también escasez de agua. En la época lluviosa se convierte en una región llena de pequeños pantanos, lodazales y charcos de agua estancada. Algunas veces, la época cálida se torna más larga debido a los cambios provocados en la región por la constante deforestación. La vegetación del lugar se ha diferenciado claramente dependiendo del área topográfica en que se encuentre. En Uaxactun se definen tres tipos de áreas topográficas, a saber:

  1. Área Montañosa:

Son elevaciones pronunciadas donde se llega a alcanzar hasta 312 m sobre el nivel del mar. El terreno es quebrado y formado por vegetación del bosque alto. Los asentamientos se dan principalmente en las cimas de los cerros, sobre suaves pendientes, en donde el terreno fue debidamente arreglado, y al pié de éstos.

  1. Área Intermedia:

Terreno relativamente plano, con una leve pendiente hacia el bajo Juventud. Su elevación va de 175 m hasta 163 m sobre el nivel del mar. Se encuentran entre las áreas montañosas y las llanas. Su bosque es alto, entremezclado con vegetación baja.

  1. Área Llana:

No tiene elevaciones considerables; las únicas son las que permiten el asentamiento de escasos grupos, especialmente en el sur, en donde se dan en forma de «islas» dentro de lo que es el bajo Juventud. Su menor elevación es de 153 m sobre el nivel del mar. El bosque es achaparrado, aunque también se encuentran algunos árboles propios de los bosques altos.

DESARROLLO DEL TRABAJO

Para realizar una investigación profunda de la población y composición de las poblaciones rurales, se hace necesario un análisis de cómo influyeron el medio ambiente y los factores sociales en la población del área (Ford 1982:126). Postulados como el anterior, y tomando siempre en cuenta las investigaciones realizadas en el área de Tierras Bajas Mayas, para conocer los diversos patrones de asentamiento, se decidió investigar Uaxactun. Las diversas etapas de nuestro trabajo fueron realizadas de la siguiente manera:

FASE 1

Consistió en abrir cuatro brechas de cinco kilómetros de longitud cada una, hacia cada uno de los puntos cardinales. Se tomó como punto de partida: la pared divisoria entre la cámara uno y la cámara dos de la segunda planta de la Estructura A‑XVIII. Las brechas permitieron delimitar el área, sustentando la idea de que puede encontrarse una ocupación habitacional mucho mayor o viceversa, en tanto se aleja más del centro de Uaxactun. En cada una de las brechas se realizaron pozos de sondeo, ubicados cada 25 metros. Estos fueron excavados hasta el manto de la roca caliza y controlados mediante lotes estratigráficos naturales. Los pozos efectuados sobre las brechas permitieron conocer hasta qué kilometraje se podría encontrar presencia habitacional.

FASE 2

Consistió en realizar pozos de excavación de un metro cuadrado hasta detectar la roca caliza. Dichos pozos fueron controlados por medio de lotes artificiales de 20 centímetros cada uno, y fueron excavados en:

  1. Los centros de la plaza
  2. Afuera de ellas
  3. Alrededor de los montículos aislados

El objetivo de realizar estos pozos fue obtener suficiente material cerámico que permitiera fechar los grupos y montículos habitacionales, para así poder llegar a conocer los estadios dentro de la cronología de Uaxactun y determinar también la expansión del sitio en términos de temporalidad. Además del estudio cerámico, se llevó a cabo un análisis de diferentes elementos visibles en la superficie, especialmente plataformas de tipo doméstico, las que pueden entenderse sin mayores excavaciones y con lo cual se pudo clasificar éstos grupos como residencias de carácter rural; ya que las residencias de la clase elitista son notablemente diferentes en tamaño y forma. Estos rasgos observados fueron de tipo estructural:

  1. Restos de muros
  2. Tamaño de montículos
  3. Chultunes
  4. Pisos

Elementos rituales observados:

  1. Templo con dimensiones acordes al grupo
  2. Altares

Elementos utilitarios observados:

  1. La cerámica

Debido a que no se realizó excavación en los edificios, no se pudo dar una secuencia de la evolución constructiva de los grupos. Nuestra información se basa únicamente en los pozos de prueba hechos en las plazas y fuera de ellas y así como en los elementos observables a simple vista sobre el terreno. Se debe aclarar que la temporalidad de los grupos se da en forma general, ya que ninguna estructura fue excavada por lo que cuando se dice que un grupo con su totalidad de estructuras pertenece al Clásico Tardío, se hace en base únicamente a la cerámica obtenida de los pozos. Se sabe de lo limitante de tal técnica de análisis, pero solamente futuras excavaciones en cada uno de los montículos podrán fechar fehacientemente cada una de las edificaciones.

EL ASENTAMIENTO

El foco principal de esta investigación estuvo centrado en los grupos del Clásico Tardío de carácter rural, habiendo sido clasificados un total de 118 para ésta época. La información proviene de los mapas levantados durante el reconocimiento del área (Paz 1986; Acevedo 1986), la que se dividió en Montañas, Intermedia y Llana, cada una con sus propias peculiaridades como ya se mencionó.

Los conglomerados están formados desde dos montículos como mínimo a 17 como máximo, los cuales por lo general están ordenados alrededor de uno o varios patios. Entre ellos se ha podido encontrar ordenamientos parecidos a los patrones de plaza identificados por Becker para Tikal (1982). No se han clasificado como grupos aquellas construcciones con una sola estructura, aunque bien puede ser que haya tenido alguna compañera ahora parte del universo «invisible», esto debido a su deterioro natural o a causas humanas prehispánicas o modernas.

Ninguno de estos grupos de carácter rural tiene la monumentalidad de los grupos elitistas, aunque si hay marcadas diferencias observables entre ellos mismos, siendo a veces menor o mayormente elaborados unos de otros. Estas diferencias arquitectónicas pueden expresar una posición social superior como ha sugerido Willey, al decir que «los grupos grandes fueron probablemente residencias para gente con un estatus social diferente» (Becker citando a Willey 1982).

En cuanto a la forma en que están dispersos no hay uniformidad o distancia alguna que los caracterice pudiendo estar diseminado en cualquier parte del terreno y a cualquier distancia. Debido a ello, algunos se encuentran bastante cerca, como los que aparecen en las inmediaciones de los grupos mayores o bastante alejados como aquellos que están a 2.5 km del Grupo A.

Básicamente los grupos son de organización compacta, al estar ordenados los montículos alrededor de uno o varios patios y marcadamente separados por distancias no repetitivas.

Tampoco hay una diferencia en cuanto a que si son más numerosos o no por el hecho de estar más cerca o alejados del centro. Tal pareciera que simplemente aprovecharon el espacio físico a su alcance y los recursos naturales que decidieron explotar. Sin embargo hay que recordar que quienes más cerca estaban del centro del sitio gozaban de un mayor estatus económico social tal y como lo evidencian los restos encontrados en Uaxactun y otros sitios del área Maya; sin embargo, existe una tendencia de mayor concentración hacia el sur que hacia el norte, lo que parece estar relacionado con Tikal.

También hay montículos bastante pequeños, especialmente hacia el sur del sitio, localizados en áreas de canteras, los cuales pudieron estar relacionados a actividades como éstas (Paz 1986).

La relación de los grupos rurales con los elitistas del centro, se manifiesta debido a su proximidad física (Acevedo 1986; Paz 1986), su cerámica común (Smith 1955), y a sus estilos constructivos observables. Todo esto supone una subordinación tácita que debió existir de los grupos menores hacia los mayores. El hecho mismo que hayan existido éstos centros de carácter rural y no se hayan desarrollado majestuosamente en comparación como lo hicieron los centros mayores, les hace quedar subordinados a ellos. Así mismo ninguno de estos grupos presenta estelas, tampoco Conjuntos tipo Acrópolis o construcciones de carácter público propias de los grupos elitistas. Por lo que aparte de las conjeturas de tipo físico que se pueden hacer, se puede inferir en ellos relaciones subordinadas de tipo económico‑social.

Se analiza ahora la ocupación del sitio en lo que ahora atañe: el Clásico Tardío. A este lapso de tiempo se le conoce localmente como fase Tepeu, estando la misma dividida en tres facetas.

De los 131 grupos (100%), que existen en el área rural de Uaxactun, 118 de ellos corresponden a la época Clásica Tardía, lo que muestra que es el mayor periodo ocupacional del sitio, tanto del área rural como del centro. Estos 118 grupos se descomponen de la siguiente manera: para Tepeu 1 existió un total de 24 grupos (20.34%), luego para Tepeu 2 se da un incremento constructivo y es cuando Uaxactun tuvo la mayor manifestación ocupacional, al encontrarse para ese entonces un total de 106 grupos (89.83%). Luego, para el Clásico Tardío Terminal (Tepeu 3), se dio un declive, estando presentes para ésta fecha tan solo 7 grupos (5.9%). Algo similar ocurre en los centros elitistas, por lo que el movimiento declinatorio del sitio se da en forma general, ya que tan solo la parte central del Grupo A construye para Tepeu 3 (Valdés 1986:127‑128). Terminando el último registro glífico del sitio al erigirse para el año 889 DC la última estela del sitio (Smith 1950:68).

Analizando fisiográficamente la ocupación, se pudo corroborar que las áreas preferidas para la construcción son aquellas libres de inundaciones como la Montañosa y la Intermedia. Modelo seguido por otras comunidades, como Tikal para mencionar solo un ejemplo (Ford 1982). Es así como en las Montañas hay un total de 56 grupos (47.46%), de los 118 clasificados para Tepeu. Posiblemente éstos estuvieron dedicados a la explotación de canteras y de otros recursos naturales del lugar. Luego, en el área Intermedia hay un incremento, estando ocupada por 61 grupos (51.69%); es muy probable que se dedicaran mayormente a labores agrícolas, por ser ésta el área más apta para ello. En el bajo Juventud o sea en el área Llana, es donde menos manifestación arquitectónica se encuentra, siendo tan solo 1 grupo (0.85%) el localizado, esto debido a que el lugar está sujeto a inundaciones durante la época de lluvia. Este último conglomerado se da en una «isla» y muy cerca de la orilla del bajo.

Ahora se analiza el área sobre la base de las facetas de ocupación y la relación existente entre los grupos y su medio ambiente. Durante Tepeu 1, el área Montañosa presenta 12 grupos (52.17%), siendo la mayor ocupación de las tres áreas durante ésta época, ya que la intermedia presenta dos grupos menos, esto es 10 (43.47%), y la Llana apenas un grupo (4.34%). Siendo ésta faceta únicamente cuando el bajo es ocupado momentáneamente. Como se puede inferir, al parecer durante ésta época había cierta predilección por las montañas, aunque en verdad esto no es muy significativo.

Luego, para Tepeu 2, el área Montañosa tiene un aumento ocupacional manifestados por sus 47 grupos (41.22%), con relación a los 12 de la faceta anterior. Algo parecido sucede en el Área Intermedia, ya que de los 10 grupos anteriores, se llega a 67 (58.77%), durante Tepeu 2, con ello cambia el área preferencial de asentamiento, ya que ahora el lugar elegido es el terreno Intermedio. En el área Llana no se da ahora ningún asentamiento, lo cual podría estar relacionado con la dificultad que representaba el vivir en una «isla», rodeada de agua durante la época lluviosa. La preferencia de asentarse en el área de producción agrícola hace pensar en necesidades de este tipo que tenían que ser resueltas, aunque puede haber otras que será necesario analizar. Tepeu 2 es el periodo de mayor actividad rural, algo similar ocurre con los grupos elitistas, especialmente en el A y B, donde se construyen varios edificios y calzadas (Smith 1950; R. Smith 1955; Valdés 1985).

Para el Clásico Terminal ‑ Postclásico Temprano ‑ o sea Tepeu 3, hay un decrecimiento ocupacional manifiesto en un total de siete grupos, contrario a los 114 que se dieron en la época anterior; de ellos, tres (42.85%), se asentaron en la parte Montañosa, algo parecido ocurre en la Intermedia donde cuatro (57.14%), se encontraron. Todo ello también está en concordancia con lo que ocurre en el centro del sitio, donde se presenta un declive substancial, siendo tan solo la parte central del Grupo A, donde el complejo palaciego a.C. continúa construyendo y colocando entierros. Es esa época cuando se erige la Estela 12 fechada para el año 889 DC (Smith 1950:68). El área Llana o bajo Juventud nuevamente se encuentra vacía en ocupación para esta parte terminal de Tepeu.

En términos generales este fue el desarrollo del área periférica de Uaxactun durante un periodo que abarca casi los 300 años, crecimiento que se inició al parecer por el lado sur del mismo, ya que es donde está más densamente poblado. En términos numéricos, en el sur existe un total de 76 grupos en contraposición de tan solo 55 en el norte. Esto es manifiesto aun en las épocas anteriores al Clásico Tardío, teniendo hacia el sur la mayor concentración de grupos Preclásicos y Clásico Temprano con relación al norte (Paz 1986; Acevedo 1986). Esto bien puede estar relacionado a que hacia el sur está la ciudad de Tikal, con la que debieron de existir muchos nexos.

CONSIDERACIONES FINALES

En resumen, con los datos expuestos anteriormente se puede afirmar que los habitantes de Uaxactun al igual que de otros sitios de Petén, prefirieron las tierras elevadas libres de inundaciones para el asentamiento de sus construcciones, preferencia que se da tanto en las construcciones de carácter rural, como elitistas, tendencia que en el caso de Uaxactun viene desde el Preclásico.

Es un hecho que existen diferencias arquitectónicas entre los grupos mayores y los menores, lo que obviamente expresa distintos niveles socio‑económicos. No está de más recalcar que aquellos grupos de carácter menor se encontraban en las inmediaciones de los mayores y tenían privilegios que no gozaban los más alejados. Como ya se apuntara, el hecho de que los grupos de carácter rural no se hayan desarrollado arquitectónicamente y alcanzando un desarrollo monumental como los elitistas, les hace caer dentro de una marcada diferenciación y subordinación tanto económica como de clase.

Los conjuntos no se pueden entender a plenitud simplemente con el análisis presentado ahora, se podrían hacer otros tipos de enfoques y dar nuevas inferencias, por lo que hoy se está presentando tan solo un ejemplo de lo que se puede hacer sin necesidad de excavaciones mayores.

REFERENCIAS 

Acevedo, Renaldo

1986   Informe del patrón de asentamiento del sector norte, Uaxactun, Petén. Proyecto Nacional Tikal, Guatemala.

 

Becker, Marshall J.

1982   Ancient Maya Houses and Their Identification: An Evaluation of Architectural Groups at Tikal and Inferences Regarding Their Functions. Revista Española de Antropología Americana 12:111‑129. Madrid.

 

Folan, William et al.

1987   Un análisis estadístico preliminar del patrón de asentamiento de Calakmul. Universidad Autónoma del Sureste, México.

 

Ford, Anabel

1982   Los Mayas en El Petén: Distribución de la población durante el periodo Clásico. Mesoamérica 3. CIRMA, Guatemala.

 

Lundell, Cyrus L.

1937   The Vegetation of Petén. Carnegie Institution, Washington D.C.

 

Paz Bone, Ana María

1986   Investigación habitacional de los Cuadrantes Sureste y Suroeste de Uaxactun. Proyecto Nacional Tikal, Guatemala.

 

Puleston, Dennis E.

1973   Ancient Maya Settlement Patterns and Environment at Tikal, Guatemala: Implications for Subsistance Models. Tesis Doctoral; University Microfilms, Ann Arbor, Michigan.

 

Ricketson, Oliver G. y Edith B. Ricketson

1937               Uaxactun, Guatemala: Group E, 1926‑1931. Pub.477, Carnegie Institution, Washington, D.C.

 

Smith, A. Ledyard

1950   Uaxactun, Guatemala: Excavations of 1931‑1937. Carnegie Institution, Publicación No. 588, Washington, D.C.

 

Smith, Robert E.

1955   Ceramic Sequence at Uaxactun, Guatemala. Middle American Research Institute, Publication No. 20, Tulane University, New Orleans.

 

Valdés, Juan Antonio

1986   Reporte arqueológico de las exploraciones realizadas en Uaxactun durante 1983‑1985. Proyecto Nacional Tikal, Guatemala.

 

Wauchope, Robert

1934   House Mounds of Uaxactun, Guatemala. Carnegie Institution, Publicación 436, Contribution No.7, Washington, D.C.